El gesto de Junqueras alivia al PSOE y enerva a las derechas
La misiva del líder de ERC tranquiliza a los barones más críticos aunque Page insiste en que no cabe la vía escocesa
Quizá pueda saber a poco, a un paso aún «insuficiente», pero al menos sí sirvió para aquietar las aguas en el PSOE después de semanas de cierta zozobra. La tribuna de Oriol Junqueras inyectó optimismo en la Moncloa y sosiego en el partido.
Tras las palabras de Pedro Sánchez en el acto con Pere Aragonès en Foment del Treball, elaboró una primera respuesta oficial el secretario de Organización socialista y titular de Transportes. La misiva de Junqueras, dijo José Luis Ábalos en el programa de La Sexta Al rojo vivo, es una «reacción» a la «política de diálogo» del Gobierno. Su «autocrítica» demuestra, siguió, que Esquerra ha asumido que «el marco político del diálogo tiene que estar dentro de la legalidad». El Ejecutivo, añadió, no respaldará la vía escocesa, pero tampoco exigirá a ERC que «renuncie a su pensamiento».
Que el giro de ERC aplacó enseguida un malestar latente en algunos sectores del PSOE lo probó la rápida respuesta de Guillermo Fernández Vara. «La política no son solo gestos, pero son muy necesarios. Y este es muy importante. Hay que salirse al encuentro dentro de la Constitución», dijo el presidente extremeño en Twitter. Otro barón que había expresado sus «dudas» respecto a los indultos era el castellanoleonés Luis Tudanca. En su entorno respiraban más aliviados: «Es un buen síntoma. Ojalá esto vaya como pinta».
Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, prefirió tocar de soslayo el tema. «Lo que afecta a todos los españoles» se ha decidir «entre todos, no por partes», dijo. Es decir, que tampoco vale la vía escocesa, un referéndum pactado.
Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y previsible futura líder de Podemos, se congratuló de que tanto el PSOE como los republicanos empiecen a caminar por la senda del diálogo que los morados llevan defendiendo varios años, informa Miguel Ángel Rodríguez.
La misiva, en cambio, fue recibida con incredulidad por las derechas. PP, Vox y Ciudadanos coincidieron en no creer el freno a la vía unilateral señalado por Junqueras y no confían en la política de apaciguamiento que propugna la Moncloa.
«Engaños y mentiras»
Según Pablo Casado, líder del PP, ya ha habido «demasiados engaños y demasiadas mentiras» tanto de los «independentistas como del Gobierno» para confiar en la palabra de unos y otros. «Si quieren algún tipo de modificación de la Constitución tendrán que venir al Parlamento y plantear una reforma del modelo de Estado, pero no por la puerta de atrás para permanecer en la Moncloa», declaró.
Aún más duro, el portavoz nacional de Vox, Jorge Buxadé, señaló que se trata de la posición de «un golpista, un hombre que sabía lo que hacía» y que atacó todo el ordenamiento jurídico español.
La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, puso en cuestión la verdadera intención del exvicepresidente de la Generalitat y afirmó que Sánchez «venderá» a los españoles «por un plato de lentejas» si le indulta aunque «un día» diga que renuncia a conseguir la independencia por la vía unilateral.