El Periódico - Castellano

El salario mínimo frenó 154.000 empleos en 2019, según el Banco de España

La entidad admite que el alza a 900 euros benefició a 1,4 millones de personas, pero redujo las contrataci­ones El Gobierno debe decidir en breve sobre el SMI, que congeló este año

- GABRIEL UBIETO

La penúltima subida del salario mínimo interprofe­sional (SMI), a 900 euros, la mayor en los últimos 40 años, benefició a 1,4 millones de trabajador­es. No obstante, ello también tuvo un efecto pernicioso sobre el empleo. El Banco de España publicó ayer un nuevo informe con la cara y la cruz de lo que significó el incremento del SMI en 2019. El organismo no considera que provocara directamen­te una destrucció­n de ocupación, pero sí lastró las nuevas contrataci­ones. Hasta el punto de que el organismo presidido por Pablo Hernández de Cos afirma que el incremento del sueldo mínimo hace dos años obstaculiz­ó la creación de entre 85.400 y 154.000 empleos.

El debate sobre si descongela­r o no el salario mínimo y prolongar la cadena de incremento­s más allá de los 950 euros comienza a reavivarse en el seno del Gobierno y la comisión asesora del mismo tiene pendiente publicar sus recomendac­iones al respecto. Mientras, el Banco de España ha publicado su balance sobre qué pasó en ese mismo punto hace dos años.

El ente público dispone ahora de los datos suficiente­s para poder realizar un informe de 47 páginas con varias simulacion­es sobre cómo hubiera evoluciona­do el empleo si el Ejecutivo no hubiera subido ese 22% el SMI y comparándo­los con cómo realmente evolucionó. Y sus conclusion­es son que la subida benefició a quien ya tenía empleo, con mayores ingresos, pero desincenti­vó las nuevas contrataci­ones entre los trabajador­es más precarios.

Prudencia

El estudio del Banco de España está marcado por la prudencia, después de que a mediados de 2019 publicara un primer ejercicio en el que, mediante proyeccion­es, y no datos consolidad­os, augurara la destrucció­n de 125.000 empleos. Dos años después, el organismo pasa de la «destrucció­n» al «dejar de crear» y fija esa horquilla de coste de oportunida­d entre 85.400 y 154.000 empleos. Lo que vendría a ser entre el 0,6% y el 1,1% de la población asalariada española (en enero de 2019 había 14,2 millones de trabajador­es del régimen general). Sus proyeccion­es hace dos años fueron las más fatalistas, en comparació­n con otras como las de la Airef, que estimó la destrucció­n de 24.000 empleos, o las del BBVA, que dijo que se dejarían de crear entre 75.000 y 195.000 empleos. Los investigad­ores del supervisor bancario contextual­izan en todo momento el incremento de 735 a 900 euros en un momento de desacelera­ción del mercado laboral, exhausto tras acumular un lustro de intensos incremento­s tras el desplome de la Gran Recesión. ¿Ahondó la subida del SMI en esa desacelera­ción? Sí, aunque de manera colateral entre las capas más precarias de trabajador­es.

¿Provocó una destrucció­n masiva de ocupación? No, el estudio publicado ayer por el organismo no considera que existan evidencias suficiente­s para poder afirmarlo. «Hay que tener en cuenta que esta correlació­n no puede entenderse como causal, ya que un peor comportami­ento del empleo de algunos colectivos puede deberse a muchos otros factores diferentes al incremento del SMI», reconocen los autores del estudio.

¿Quién cobra el SMI?

El 10% de la población asalariada se vio directamen­te beneficiad­a por el alza del salario mínimo pactada entre el PSOE y Unidas Podemos. Lo que, en aquel entonces, se traducía en 1,4 millones de trabajador­es. Un aumento sustancial de cobertura, porque hasta entonces el salario mínimo solo lo cobraba el 4% de los asalariado­s.

El perfil, en líneas generales, era el de un trabajador joven, con contrato temporal, de estudios básicos y empleado en una pequeña empresa. Entre las microempre­sas está particular­mente extendido el pago del salario mínimo, hasta el punto de que uno de cada tres empleados lo percibe. Y por sectores, el gremio más beneficiad­o fue la agricultur­a, hasta el punto de que seis de cada 10 trabajador­es vieron como subía su remuneraci­ón.

 ?? Ferran Nadeu ?? Trabajador­es del campo recogen fruta durante la campaña de verano.
Ferran Nadeu Trabajador­es del campo recogen fruta durante la campaña de verano.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain