Biden logra apoyo en la cumbre para rivalizar con China
El dirigente pide invertir 30 billones en planes de desarrollo para países con pocos recursos
Uno de los principales objetivos del presidente Joe Biden en esta cumbre es intentar hacer frente a la amenaza de China y de Rusia al orden mundial. Ayer los países del G7 aprobaron, según la prensa británica, el plan de Biden para rivalizar con China. El dirigente de EEUU quiere crear un proyecto alternativo al del cinturón y carretera que está desarrollando China y que emula a la antigua ruta de la seda e involucra a 70 países desde Asia del Sur hasta Europa pasando por Oriente Próximo. Es una iniciativa que lanzó en 2013 el presidente Xi Jinping y que involucra proyectos de desarrollo de infraestructuras digitales y de puertos, carreteras y ferrocarriles desde Asia hasta Europa pasando por África y al cual se han adherido más de 100 países.
El proyecto de Biden se llama Build back better world (Volver a construir un mundo mejor) y es la versión occidental de la iniciativa. Requerirá de una inversión de unos 30 billones de euros en dinero público y privado y ayudará a desarrollar países con pocos recursos de aquí a 2035. «No es solo de confrontar a China. Hasta ahora no hemos ofrecido una alternativa positiva que refleje nuestros valores y nuestra forma de hacer negocios», dijo un funcionario estadounidense al diario The Guardian.
Esta era una idea inicial de Trump que ha retomado Biden.
Respuesta al covid
En la declaración del G-7 que será publicada al terminar la cumbre también se ccuestionará la actuación de China con respecto a los derechos humanos (por permitir el trabajo forzado), con respecto a Taiwán y con el covid por no permitir el acceso a su territorio de equipos internacionales de científicos para inspeccionar la situación de la pandemia. Se espera que sea muy parecido al comunicado de los ministros de Exteriores del G-7.
También se espera una condena a los ciberataques que se han producido en las últimas semanas contra objetivos estadounidenses y que el Pentágono calificó en su momento como «un acto de guerra». Fueron dos ataques perpetrados mediante el ransonware, que bloquea los servicios informáticos y no los libera hasta que la compañía no paga un rescate, que suele ser millonario y con criptomonedas. Según el FBI los responsables fueron un grupo de piratas informáticos radicado en Rusia y llamado Revil. Biden critica a Rusia por permitir que los hackers operen en su territorio.
Para la semana que viene hay prevista una reunión entre el presidente de EEUU y su homólogo ruso en territorio suizo. Biden ya lanzó un mensaje a Putin nada más aterrizar en Inglaterra. «Le diré lo que quiero que sepa», afirmó ante soldados estadounidenses Biden, que sabe que tendrá más fuerza en esa reunión si se confirma el respaldo de todos los países del G-7.