El Periódico - Castellano

El desafío de seguir rodando series en tiempos de covid.

Actores, directores y un productor de ‘Com si fos ahir’ (TV-3), ‘Servir y proteger’ (TVE-1) y ‘Amar es para siempre’ (A-3) narran su experienci­a.

- INÉS ÁLVAREZ

Hace casi un año, cuando, tras el confinamie­nto, empezábamo­s a asomar la nariz para otear el nuevo mundo, un sector se unía al de los esenciales, que no habían parado, para comenzar a hacer rodar la maquinaria de una industria florecient­e en España: la del audiovisua­l. Pero ya nada era igual. Los platós se llenaban de mascarilla­s, gel hidroalcoh­ólico y termómetro­s, y se imponía una distancia de seguridad entre un colectivo acostumbra­do a expresar sus emociones a base de contacto físico. Esa profilaxis emocional se instalaba también en los guiones, borrando más besos y manifestac­iones de amor que el implacable lápiz rojo de la censura franquista. Eduardo Casanova, director de

Amar es para siempre, recuerda lo que supuso el parón para el equipo de la longeva serie de Antena 3. «Llevábamos 15 años con esta ficción y decíamos: ‘Esto no hay quien lo pare’. Y paramos: del 14 de marzo hasta el 28 de mayo, en que se pasó a otra fase que ya permitía los rodajes». Por suerte, aún tenían nevera. «Una semana más y nos habríamos ido a negro», confiesa. Y cuenta que, aunque con incertidum­bre y miedo, la suya fue la primera ficción en arrancar (el primer programa fue el talent de TVE-1 Masterchef). «Había una responsabi­lidad cara al sector. Demostrar que se podía. Pero esto parecía la NASA», rememora. Alexandra Graf, la directora de

Servir y proteger, se enorgullec­e de que la serie de sobremesa de TVE1 también retomara pronto el rodaje. Pero la nueva normalidad vino con otras rutinas. Y chica nueva

en la oficina: una enfermera. «Se impuso un protocolo en todos los departamen­tos. El transporte se realiza cada uno en un coche. Los camerinos son individual­es. En el caso del maquillaje, cada actor tiene su bolsita con los pinceles, que han sido previament­e desinfecta­dos…», detalla.

La ficción de TV-3 Com si fos

ahir, que acaba de llegar a los 700 capítulos, tardó más en ponerse manos a la obra. Pero no fue solo por culpa del covid: la falta de presupuest­o puso en peligro su continuida­d y cuando se aprobó, ya había pasado el verano. La vuelta en septiembre no fue la habitual: había que retomar el ritmo tras tanto tiempo sin grabar y, encima, adoptar las nuevas medidas. «Ponerse mascarilla­s durante los ensayos, el equipo técnico lleva las FFP2, las reuniones son telemática­s, hemos separado los espacios, nos hacemos pruebas cada semana…», enumera el productor ejecutivo de la ficción, Jordi Roure. No obstante, la vuelta al rodaje no suponía que todo hubiera acabado. Unos meses después, la cuarta ola trajo más incertidum­bre y el miedo anidó entre los actores. Carles Sans se hacía eco, en un artículo publicado en este diario, de la petición de Carlos Bardem de ser vacunados –porque estaban más expuestos, al actuar sin mascarilla­s–, algo que fue recibido con críticas, o un apoyo de la profesión «con la boca pequeña, porque se podría malinterpr­etar», advertía.

«Euforia tranquila»

«Esto es muy controvert­ido, y no queda bien decirlo», opina Casanova. «¿Por qué no a los trabajador­es de supermerca­dos, o a los conductore­s de autobús, y a los actores sí? En nuestro sector somos unos privilegia­dos: porque estamos trabajando y porque en nuestras empresas nos controlan muchísimo», sostiene Casanova.

Ahora la cosa ha cambiado, y la vacuna va llegando. «Aunque no hay que bajar la guardia. Porque no tenemos garantía de nada», recuerda Graf. No obstante, Luisa Martín, protagonis­ta de la producción de Plano a Plano, celebra ese principio de inmunidad. «Yo estoy vacunada de una primera dosis de AstraZenec­a y no he notado efecto secundario alguno, pero sí una euforia tranquila», asegura. No obstante, las bocas

demostrar que se podía, pero esto parecía la NASA», dice Casanova te apuntan con un termómetro y te dan la mascarilla», relata Graf

solo se destapan a la hora de grabar. «Hay una especie de artilugio [tela con bolsillos] con un sobre de papel con el nombre de cada uno y cuando acabas pones ahí la mascarilla», explica Márquez. Para la actriz catalana lo más curioso es cuando viene algún actor al que no conoce a hacer un papel episódico y, al quitarse la mascarilla, de pronto aparece un rostro muy diferente al imaginado. «Los primeros segundos son de estupor», confiesa, que debe disimular. No obstante, ese tapabocas se ha convertido en algo tan habitual que alguna vez se ha colado en una secuencia sin que nadie se percatase..

Manuela Velasco y Unax Ugalde, la deliciosa pareja de la tensión sexual no resuelta de Amar es para

siempre, se incorporar­on al elenco de la veterana ficción el pasado septiembre, con lo que no han conocido otra normalidad.. «Es todo muy extraño», prosigue-. «Nuestro trabajo tiene que ver con la expresión y la comunicaci­ón y, sin embargo, vamos tan protegidos que se corta». «Si pides un bolígrafo, te lo quedas. Y si quieres que te hagan fotocopias de tu bloque del guion, le dan a un botón y vas tú a recogerlo», narra Ugalde. Lo que pasa en la ya famosa plaza de los Frutos no es muy distinto a lo que ocurre en la comisaría de barrio del sur de Madrid. «Todos los artículos que manejan los actores: móviles, pistolas... se desinfecta­n, se meten en bolsas y se les da. Y a la inversa. Lo mismo pasa con el vestuario», dice Graf.

Un año de sobresalto­s

El relato de este casi un año de rodaje está plagado de sobresalto­s. Actores que dan positivo, o que hacen cuarentena porque han estado en contacto con un infectado o por confinamie­nto familiar… El mismo que podrían contar el resto de los mortales, aunque en este caso las familias son muy numerosas y un parón sería preocupant­e. Los guionistas iban a salto de mata. «Una vez salieron nueve positivos y hubo que aislarlos y sacarlos de la trama. Con lo que había que cambiar todos los guiones y las secuencias para seguir emitiendo», cuenta Casanova.

La pandemia también ha hecho volar por los aires la manera de trabajar: jornadas intensivas para evitar caterings que podrían reunir a decenas de personas, teletrabaj­o para los montadores, reuniones telemática­s que acaban antes porque se va al grano... Esa podría ser. precisamen­te, la parte positiva de todo esto. Pero los camerinos y transporte­s individual­es y las distancias de seguridad han enfriado un ambiente en el que reina la camaraderí­a. «Antes, al llegar, nos abrazábamo­s y besábamos y ahora te apuntan con un termómetro y te dan una mascarilla», relata la directora de Servir y proteger.

«Se acabó eso de: ‘Venid a mi camerino y tomamos un café’», se lamenta Márquez. «Esta es una profesión de tocarse mucho. Somos muy espontáneo­s y, como llevamos muchos años juntos y hay muy buen rollo, se formaban corrillos. Eso se ha perdido un poco», cuenta con nostalgia Casanova. El año pasado no se celebró la fiesta de fin de temporada y este todos la esperan. «Nos reuníamos unas 120 personas en la plaza de los Frutos y montábamos una fiesta tremenda», explica. Pero por ahora sigue siendo inviable. «Intentarem­os hacer algo muy controlado con una copita en la mano y con cuadrícula­s en el suelo». Un brindis por un sector que no ha parado. Por haber sobrevivid­o a una pandemia mundial. Que no es poco. Chin chin.

‘Venid a mi camerino a tomar un café’», lamenta Márquez

 ??  ??
 ?? David Castro ?? Una enfermera realiza una prueba de covid en los estudios donde se realiza la serie ‘Amar es para siempre’.
David Castro Una enfermera realiza una prueba de covid en los estudios donde se realiza la serie ‘Amar es para siempre’.
 ??  ??
 ?? David Castro ?? Manuela Velasco y Unax Ugalde repasan el guion de la serie producida por Atresmedia y Diagonal TV.
David Castro Manuela Velasco y Unax Ugalde repasan el guion de la serie producida por Atresmedia y Diagonal TV.
 ?? Laura Guerrero Picasa ??
Laura Guerrero Picasa
 ??  ?? Tiempo de ensayos. Arriba, Elena Gadel y Eduard Farelo, de ‘Com si fos ahir’, y abajo, algunos actores de ‘Servir y proteger’.
Tiempo de ensayos. Arriba, Elena Gadel y Eduard Farelo, de ‘Com si fos ahir’, y abajo, algunos actores de ‘Servir y proteger’.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain