Sànchez se desdice sobre el 1-O y niega la crisis en Junts
El número dos, cuestionado, asegura ahora que el referéndum buscaba la independencia
Donde dije digo, digo diego. Algo parecido al viejo refrán castellano se puede decir a la vista de lo ocurrido ayer con el secretario general de Junts per Catalunya (JxCat), Jordi Sànchez, que compareció de forma extraordinaria para afirmar ahora que «ni escribí ni he pensado nunca que el 1-O no se hizo para ganar la independencia», tras un artículo la semana pasada en el diario Ara en el que afirmaba que el referéndum del 1-O pretendía forzar una negociación con el Estado y no proclamar «efectivamente» la independencia.
Esta posición generó un notable malestar político que ha llevado incluso a la recogida anónima de firmas pidiendo la dimisión del secretario general del partido, que ha visto como dirigentes como Laura Borràs -toda una presidenta del Parlament-, Elsa Artadi y Aleix Sarri, entre otros, hayan reafirmado, en contra de las tesis de Sànchez, que el 1-O tiene legitimidad como referéndum de independencia.
Sánchez negó ayer una y otra vez, por activa y por pasiva, haber escrito lo que escribió. Y aseguró que se ha tratado de «manipulaciones» de sectores ajenos a JxCat. El secretario general insistió de forma machacona en que «algunos han querido aprovechar de forma anónima una manipulación de una expresión de mi artículo para abrir una supuesta crítica», en relación a su controvertido artículo de la pasada semana.
Filas prietas
Sànchez quiso cerrar filas en torno a su liderazgo. El secretario general trató de quitar hierro a la situación pese a la existencia de voces críticas hacia su gestión, tanto por el artículo como por la negociación del pacto de Govern con ERC. «JxCat está absolutamente unido, compacto y cierra filas no sólo con el proyecto de la independencia sino también con todo el sentimiento de miles de personas y con todo el capital político que representa el otoño del 2017», proclamó.
Por todo ello, subrayó que «nadie en la ejecutiva ha mostrado desacuerdo con este posicionamiento», que él mismo manifestó la semana pasada. «Cero peticiones de dimisión, gran ruido comunicativo y una inexistente crisis en la estructura del partido», añadió antes de confirmar que habló al respecto con el expresident Carles Puigdemont, con quien asegura que comparte las tesis expresadas ayer. «Me siento absolutamente acompañado», aseguró de modo tajante.
Reafirmación
«Lo volvería a hacer», afirmó Sànchez por otra parte respecto al 1-O y a sus actuaciones en esos meses de tensión en defensa del derecho a reunión y manifestación y a la libertad de expresión. Y aseguró que los indultos son solo un «pequeño grano de arena» en la resolución del conflicto.
Los indultos, según añadió Sànchez, «no serán, no pueden ser, a cambio de ningún arrepentimiento por mi parte y estoy convencido de que por parte de ningún otro preso. No comportarán ninguna renuncia ni a los ideales ni a la legitimidad de continuar actuando democráticamente para que este país halle una solución política para ejercer la autodeterminación».