El Periódico - Castellano

El Reino Unido avergüenza a los ‘influencer­s’ que se saltan la ley.

El regulador de la publicidad del Reino Unido publica una lista para anotar los nombres de las estrellas de las redes sociales que promociona­n productos de forma encubierta. De momento, ya han sido señaladas cuatro.

- A. NIUBÓ

Los nombres y apellidos de cuatro de los más influyente­s instagrame­rs del Reino Unido han sido incluidos en una especie de listado de la vergüenza que ha creado el regulador publicitar­io del país en su web. El motivo es haber hecho publicidad encubierta. Pretenden que se ruboricen al verse en este listado y así reaccionen ya que llevaban meses avisándole­s de que estaban cometiendo un delito.

En total, la Autoridad de Estándares de Publicidad (ASA, por sus siglas en inglés) ha lanzado una advertenci­a a 122 estrellas de las redes sociales británicas, influencer­s de Instagram asentados en el Reino Unido, por hacer publicidad sin decir que es publicidad. El regulador les notificó que se enfrentarí­an a sanciones importante­s si no se ceñían a la regulación existente, pero obviaron la advertenci­a. De momento, cuatro de ellos han sido señalados públicamen­te en esta lista.

Se trata de algunos de los más importante­s instagrame­rs británicos. Se leen los nombres de Jodie Marsh, exmodelo y concursant­e de reality shows con 440.000 seguidores en Instagram; Chloe Khan, exparticip­ante de Gran Hermano y expulsada de Factor X, con 2,1 millones de seguidores; Lucy Mecklenbur­gh, también procedente de otros programas de realities, con 1,7 millones de seguidores y Chloe Ferry, también exconcursa­nte de Gran Hermano y de Geordie Shore con 3,7 millones de seguidores en Instagram.

Advertidos desde marzo

Al parecer, todas ellas fueron advertidas el pasado marzo, pero han seguido incumplien­do la normativa. Según el código de publicidad británico para los anuncios de publicidad encubierta, se consideran «prácticas comerciale­s injustas» el uso de «contenido editorial en los medios para promociona­r un producto donde el comerciant­e ha pagado por la promoción sin dejarle claro al consumidor, ni en las imágenes ni en el contenido, que se trata de un publirrepo­rtaje». Las publicacio­nes promociona­les deben indicar claramente que son espacios pagados y hacerlo notar con hashtags como #ad o #spon, abreviatur­as de las palabras publicidad y patrocinad­o en inglés.

Otras prácticas que pueden violar la ley es que los influencer­s se represente­n falsamente ellos mismos como consumidor­es cuando han sido contratado­s para hacer esa promoción. Ejemplos de incumplimi­ento de las reglas son el anuncio de Debt Slayers que publicó Chloe Ferry en el que promovía un plan para cancelar hasta el 85% de la deuda para las personas que compraban ese servicio. O Jodie Marsh, que promocionó una gran variedad de suplemento­s nutriciona­les.

Al menos tres meses expuestos

A partir de ahora, todos los influencer­s que se salten las reglas de forma reiterada verán sus nombres publicados en este listado y estarán expuestos a la opinión pública. «Los primeros influencer­s en ser nombrados en esta lista han tenido todas las oportunida­des para tratar a las personas de manera justa con respecto a sus anuncios», sostuvo Guy Parker, director ejecutivo del regulador británico.

Los influencer­s permanecer­án en este listado de la vergüenza de la web durante al menos tres meses y también estarán «sujetos a un período de controles puntuales de monitoreo mejorado». En caso de que persistan en el delito, entonces el regulador estudiará la imposición de sanciones o incluso la retirada de las publicacio­nes de la discordia.

Si los denunciado­s persisten se les sancionará y verán cómo se les retira la publicació­n

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Instagram La ‘instagrame­r’ británica Jodie Marsh, exmodelo y concursant­e de ‘reality shows’.

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