El toque de queda dará oxígeno a los hospitales pese a los ingresos en uci
Salut percibe «cierta estabilización» en la subida de contagios entre los jóvenes Los cuidados intensivos superarán los 400 enfermos en 15 días
Los hospitales catalanes empezarán a notar, a partir de la próxima semana, el impacto de las medidas adoptadas por la Conselleria de Salut para hacer frente a la quinta ola del coronavirus. Al menos esta es la previsión del departamento. «La estabilización de contagios que estamos notando ya, aunque hay que ver bien su evolución, nos hace pensar que podremos notar una cierta estabilización del número de ingresos la próxima semana», explicó ayer el subdirector general de Coordinació de Salut Pública, Xavier Llaberia.
Para ver una estabilización en las camas de ucis ocupadas por enfermos con covid habrá que esperar «un par de semanas». Llaberia da por hecho que Catalunya «subirá» de los 400 enfermos con coronavirus en ucis (ayer había 307) y de los 2.000 en plantas convencionales de hospitalización (1.683 ayer). Según Llaberia, Catalunya experimenta ya una «estabilización en la subida de contagios» entre las personas de 15 a 29 años, igual que entre las de 30 a 39 años. Aun así, la presión hospitalaria sigue (y seguirá) al alza: el 18% de las camas de los hospitales ya están ocupadas por covid-19 y, en las ucis, el 42% de los enfermos tienen esta enfermedad. «Uno de cada cuatro ingresados en hospitales tiene menos de 40 años, al igual que uno de cada cinco en ucis», destacó.
Test de antígenos
En cuanto a las visitas de familiares a las residencias de ancianos, Salut recuerda la obligatoriedad de presentar antes un test de antígenos negativo. Estas pruebas diagnósticas son proporcionadas por la ‘conselleria’ a las residencias para que los familiares puedan realizárselas en el mismo centro antes de entrar. Inicialmente Salut había dicho que los propios familiares deberían autosufragarse estos test en laboratorios privados o farmacias, pero después rectificó.
Como explicó por su parte el portavoz de los Mossos d’Esquadra, el comisario Joan Carles Molinero, el fin de semana (del viernes al domingo) el cuerpo policial levantó 710 actas: 400 por incumplir el toque de queda y las demás por un uso incorrecto de la mascarilla, por participar en encuentros de más de 10 personas (las permitidas tanto en público como en privado) o a bares por incumplir el horario de cierre. Durante estos tres días, se realizaron en toda Catalunya 429 controles policiales y, entre los desalojos llevados a cabo por los Mossos en zonas turísticas, había «muchos turistas» que desconocían las restricciones.
Más jóvenes en las ucis
Mientras, las ucis de los hospitales catalanes siguen llenándose de pacientes de coronavirus y ayer ya tenían más de 300 enfermos críticos, 10 más que el domingo, una situación que preocupa a los responsables de Salud, que temen que este servicio podría colapsarse en 10 días, coincidiendo con el pico de la quinta ola. Las cifras de las unidades críticas ya son similares a las de finales de mayo, aunque a diferencia de entonces los pacientes son más jóvenes.
El grupo de investigadores del Biocomsc afirma que los datos de la última semana apuntan a una «contención» de contagios globales, aunque son datos que tienen que confirmar. Sin embargo, el grupo de la UPC lamenta que los datos de casos de personas mayores de 50 años continúan subiendo, así como su positivización, aunque «desde niveles muy bajos» comparado con edades más jóvenes. Entre los mayores de 70 años, las incidencias son superiores a las que se dieron en Semana Santa.
En concreto, entre la gente de edad avanzada la positividad es del 8%. Los investigadores alertan de que habrá que ver los datos de hospitalizaciones por saber los efectos de estos positivos. Insisten en que la circulación del virus es «muy alta» y la probabilidad de contagio muy elevada.
Siete fallecidos
Salut informó de que en las últimas 24 horas se contabilizaron siete muertes y 4.072 nuevos contagios. Y lo que es peor, 138 hospitalizados más, que elevan el total de pacientes hasta los 1.683.
A la vista de estos datos, la directora del CatSalut, Gemma Craywinckel, reconocía el domingo que se ha reaccionado tarde a la quinta ola del covid y auguraba que a finales de julio los pacientes críticos pueden ser 400 o 500, lo que colapsaría las ucis. Pese a todo, la velocidad de propagación del virus continúa bajando y se ha situado en 1,13, lo que significa que cada cien afectados contagian a una media de 113 personas.