El asesino de Canovelles, en prisión provisional en Murcia
El juzgado de guardia murciano ordenó el ingreso de Roger L.S., aunque se inhibirá a favor de un tribunal catalán al ser aquí donde se cometió el crimen.
Por la puerta de atrás de la comisaría de Ceballos, minutos después de las diez de la mañana, era sacado ayer de los calabozos Roger L.S., el joven de 20 años que presuntamente mató a un instructor en un club de tiro de Catalunya y luego obligó a dos mujeres a que lo trasladasen en coche a Murcia.
Su destino, la Ciudad de la Justicia de Murcia. Dada la cantidad de pruebas que hay en su contra (las cámaras incluso grabaron el momento en el que descerraja cinco tiros a su víctima por la espalda), el juzgado de guardia de Murcia previsiblemente ordenará el ingreso de Roger en prisión provisional, aunque se inhibirá a favor de un tribunal de la comunidad donde se cometió el crimen, Catalunya.
El asesinato se cometió en Canovelles (Vallès Oriental). Al sospechoso lo detuvieron poco después de llegar a Murcia, cuando dieron la voz de alarma las dos chicas a quienes tuvo como rehenes en el coche (las secuestró en una gasolinera) y obligó a conducir durante casi 600 kilómetros. Fue capturado en la estación del Carmen.
Una dotación UPR (Unidad de Prevención y Reacción) integrada por seis efectivos acudió a la estación de tren. Dos policías comprobaron el exterior, otros dos se acercaron a los andenes y los agentes Héctor López y Jesús Marín entraron en el vestíbulo de la estación, en el que a esa hora, las ocho de la mañana del domingo de Semana Santa, había unas 40 personas. López explica que, en cuanto entraron, identificaron a Roger sentado entre los viajeros. Y que Roger los vio también a ellos. Uno de los policías relataría luego que el sujeto les llegó a preguntar por qué no lo habían matado y a confesar que, de haber podido, él sí que los habría matado a ellos.
Además de por el crimen del instructor, ante la justicia tendrá que responder por el secuestro de las jóvenes. ■