Sitges y Vilanova denuncian el caos de pasajeros en la R2
Las alcaldesas envían una carta a la directora de Rodalies de Catalunya para exigir soluciones tras la avería del lunes en la línea.
Las alcaldesas de Sitges y de Vilanova i la Geltrú, Aurora Carbonell y Olga Arnau, respectivamente, enviaron ayer una carta a la directora de Rodalies de Catalunya, Mayte Castillo, en la que le expresan su malestar e inquietud ante la situación generada por la avería en la línea R2 a su paso por Gavà. Las concejalas, ambas de Esquerra, comparten su «máxima preocupación» por la situación que se está viviendo estos días, con desplazamientos, se quejan, que son «prácticamente imposibles de realizar en condiciones óptimas mediante el tren».
El servicio, escriben ambas alcaldesas, «ofrece unas condiciones de absoluto desbordamiento de pasajeros en los pocos trenes que circulan», lo que está obligando a muchos ciudadanos, lamentan, a «usar el vehículo privado». «A día de hoy, Renfe-Adif todavía no ha ofrecido ningún transporte alternativo», se quejan, algo que Renfe, de hecho, ha enmendado esta misma mañana con salidas de buses cada media hora entre Castelldefels y Barcelona, entre las 6.30 y las 9.00 horas. Por la tarde, se suman autobuses hasta Gavà y Castelldefels desde la capital catalana entre las 17.00 y las 19.00 horas. Renfe calcula que cada semana podrá cubrir unas 30.000 plazas gracias a los buses complementarios para los que serán válidos los títulos de transporte de Rodalies.
En su misiva, Arnau y Carbonell también advierten de las consecuencias económicas que puede acarrear la avería en la estación de
Gavà. Por ello reclaman a Adif información y concreción sobre el periodo de afectaciones después de que este diario advirtiera de que en un documento interno del gestor público ferroviario se habla de hasta cuatro meses para recuperar el 100% de la operatividad. Esto afectaría, señalan, de lleno en la temporada turística veraniega. Las dos alcaldesas de ERC terminan su carta a la directora de Rodalies recordando el déficit de inversiones en materia de infraestructuras. Según sus cálculos, solo se realizado el 30% de lo comprometido.
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