Ancelotti busca cerrar el círculo
El técnico persigue el único título de club que le queda en los dos años de su segunda etapa en el Madrid. El equipo blanco se mide esta noche en Sevilla con el combativo Osasuna, que afronta con la máxima ilusión su primera final en 18 años.
«No me juego la vida, me juego la Copa. Mi contrato no acaba mañana, finaliza en 2024» CARLO ANCELOTTI ENTRENADOR DEL MADRID
«Somos una familia. Queremos llevarnos la Copa, pero solo será posible con un partido perfecto» JAGOBA ARRASATE ENTRENADOR DE OSASUNA
Mientras todo el madridismo espera con recelo el aterrizaje de Pep Guardiola y Erling Haaland en Madrid el próximo lunes, Carlo Ancelotti lleva meses con la final de Copa revoloteando por su cabeza. En febrero ya le vaticinó a Jagoba Arrasate, medio en broma medio en serio, que Osasuna y Real Madrid se verían las caras en la final de La Cartuja. Y semanas más tarde, durante su momento más complicado en esta temporada, tras despedirse de la Liga al empatar en casa con el Atlético y rozar la eliminación en Copa tras caer en la ida con el Barça, mandó un mensaje a aquellos que dudaban de él, entre ellos algunos de la planta noble.
«Si ganamos la Copa, habremos ganado todos los títulos posibles que un club puede ganar en su historia en solo dos años. Hay muchos que no pueden decirlo porque no lo han hecho nunca», recordó un Carletto desafiante ante las noticias que le alejaban del banquillo blanco si caía eliminado en Copa ante el Barcelona. Hoy (22.00 horas, La 1) tendrá la ocasión de coronarse.
La más denostada
Ancelotti revelaba con ello algo que le ronda desde hace tiempo: cuadrar el círculo. Conseguir la Copa y completar el pleno de títulos con el Madrid en su segunda etapa, independientemente de lo que pase en la Champions ante el Manchester City y de lo que ocurra al final de temporada sobre su continuidad. Carlo es un hombre de metas cortas, de disfrutar del camino e ir conquistando hitos.
La Copa es, desde que Florentino Pérez desembarcó en el Real
Madrid, la competición más denostada por el club. Cinco finales en 23 años con tan solo dos títulos, siendo el último, además, el que ganó el propio Ancelotti hace nueve años. El título parece poco glamuroso para las galácticas ambiciones del presidente. Sin embargo, Ancelotti considera la Copa una competición muy «futbolera».
Quizá por ello ha contagiado al vestuario, que ambiciona conquistar este título porque además la actual plantilla, en su gran mayoría, nunca lo ha ganado. Solo lo han levantado Nacho, Carvajal, Modric y Benzema, además de un Courtois que lo hizo como atlético.
Desde que Carletto desembarcó en el banquillo blanco el 1 de junio de 2021 en sustitución del que fuera su ayudante, Zinedine Zidane, el Madrid ha ganado con el italiano al mando la Liga, la Supercopa de España, la Champions, la Supercopa de Europa y el Mundialito de
Clubs. Solo le falta la Copa del Rey y habrá completado el trayecto perfecto en dos temporadas.
No hace falta insistir en ello, pero Ancelotti es el técnico más laureado del fútbol actual. El único que ha ganado las cinco grandes ligas (Inglaterra, Alemania, España, Italia y Francia), el que más Champions ha levantado, dos con el Milan y dos con el Madrid, y un entrenador con 25 títulos en su carrera en los banquillos.
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Pese a ello, siempre ha sido un entrenador tan cabal como ambicioso. Aunque no fue la primera opción para suplir a Zidane (Allegri, Pochettino y Conte rechazaron ofertas del Madrid), cuando Florentino llamó a su puerta el italiano habló con el Everton, con el que tenía contrato hasta 2024, y los toffees le abrieron la puerta de salida.
Florentino y el futuro
Ni el más optimista habría pensado que Ancelotti estaría en disposición de cuadrar el círculo solo dos temporadas después. Es cierto que Florentino ha perdido el brillo al mirarle y que a parte del madridismo le da pereza seguir viendo a Carlo en el banquillo. Pero cuentan en su entorno que una vez ganada la Copa, que es su gran objetivo a corto plazo, luego verá con tranquilidad qué le pide el cuerpo para la temporada que viene.
Más aún sabiendo que tiene una seductora oferta de Brasil para convertirle en su seleccionador, algo que sería un colofón perfecto a una carrera en la que ya no habrá ningún club más. Hace tiempo que decidió que el Madrid sería el último. «Mi contrato acaba el 30 de junio de 2024, no mañana», dijo ayer.
Antes quiere cuadrar el círculo, por más que su amigo Jagoba intente evitarlo. «Tenemos una plantilla muy normal, es una familia. Queremos llevarnos la Copa, pero solo será posible si hacemos un partido perfecto», reflexionó ayer el preparador de Osasuna. «No me juego la vida, me juego la Copa del Rey, una competición que al principio no parece muy importante pero sí lo es», concluyó Ancelotti.
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Los merengues solo han jugado 5 finales de Copa en 23 años y el último título fue en 2014 El pulso con los navarros llega a tres días del examen europeo ante Guardiola