Los empleados catalanes faltan casi un día al mes al trabajo por baja médica
▶ Un asalariado no acude a su puesto de manera justificada el doble de horas que hace 10 años ▶ Pimec pide un debate para reducir el absentismo
Los empleados catalanes faltan al trabajo casi un día al mes por baja médica, el doble que hace una década. De media, aunque con importantes oscilaciones según los sectores, un asalariado se ausenta de manera justificada de su puesto unas 7,6 horas cada mes, lo que a lo largo del año le supone a la empresa pagar y no ver trabajado el equivalente a unos 201 euros mensuales. Así lo cuantifica un informe presentado ayer por la patronal catalana Pimec, que tiende la mano a la Administración y a los sindicatos para tratar de reducir los niveles de absentismo.
El absentismo es un tema polémico en las relaciones laborales. Por un lado, a los empresarios les supone un quebradero de cabeza, ya que ven como les faltan manos en la oficina, el comercio o la fábrica. Y para el sistema público de salud supone un coste de 2.103,2 millones de euros en prestaciones. La gran mayoría de bajas, concretamente 8 de cada 10, duran menos de 15 días.
Estadística oficial
Dicho problema lo permite cuantificar la estadística oficial y situar en esas 7,6 horas mensuales de ausencia por trabajador. La polémica viene luego en el diagnóstico del porqué. Algunos aducen una sanidad saturada, que tarda en sanar a sus pacientes. Otros hablan de sobrecargas de trabajo que acaban quemando a los trabajadores y hay voces que apuntan al fraude y abuso por parte de los asalariados. Legalmente toda baja por incapacidad temporal viene precedida por una autorización de un médico.
Ayer, Pimec puso el tema encima de la mesa y en su diagnóstico y propuestas entremezcló las tres patas. Pidió endurecer las sanciones y aumentar los controles ante el fraude. También reclamó más poder para las mutuas colaboradoras, entidades privadas que costean de su bolsillo las prestaciones; y abogó por más inversión en la sanidad pública, para reducir los tiempos de espera. Catalunya, después de Navarra, es la autonomía con las bajas más largas y, en parte, ello es porque tarda en mandar al especialista y hacer pruebas a los enfermos. ■