¿Es Christensen la solución?
La posición de mediocentro en el Barça ha derivado en un problema desde que se marchó Busquets. Ahora dos jugadores desempeñan esa funcion que antes hacía el capitán solo. Después de las siete pruebas que ha hecho Xavi, Deco buscará un fichaje el próximo verano.
La dimensión futbolística de Sergio Busquets, del ya mayor Sergio Busquets cuando se marchó del Barça a los 34 años, queda reflejada en un detalle: el Barça necesita ahora a dos jugadores para que desempeñen la labor que antes hacía uno, el capitán.
No es que Xavi Hernández no tuviera margen de elección o un relevo similar: es que ha alineado hasta siete jugadores para la posición de mediocentro. El último probado ha sido el central Andreas Christensen, que se estrenó ante el Alavés. La solución definitiva al problema no se ha encontrado: el club va a fichar un pivote el próximo verano. El Barça ha vuelto a mirar al Girona. En 2023 se llevó a Oriol Romeu; en 2024 pretende a Aleix García.
Aleix, la opción asequible
«Sustituir a Busquets era casi imposible. El que se acerca es Rodri, que está en el City y no nos lo venderían. Kimmich está en el Bayern. Hay que mirar cuánto pagó el Chelsea por Caicedo [133 millones de euros como mínimo]», explicó Deco en Esport 3, donde reconoció que Aleix se erige en la opción más asequible.
Xavi acabó satisfecho del rendimiento de Christensen en Mendizorroza; sobre todo por el 91% de precisión en el pase, ya que apenas ganó uno de los seis duelos en el balón dividido. El partido de mañana ante el Granada refrendará sus buenas impresiones si da continuidad al defensa o se trató solo de una opción puntual ante el Alavés. Detrás tiene sustitutos como Iñigo Martínez, ya recuperado de la lesión, y Pau Cubarsí, más allá de Jules Koundé y Ronald
Romeu-Gavi y Gündogan-De Jong han sido las parejas más utilizadas por Xavi
Araujo, que ya no deben desdoblarse para cubrir la banda derecha. La defensa cojea por la izquierda, operados Marcos Alonso y Alejandro Balde.
Christensen pasó a la posición de pivote en la desesperada búsqueda de Xavi, pese a disponer que de cinco futbolistas capacitados para ese rol: Oriol Romeu e Ilkay Gündogan, fichados el pasado verano; Frenkie de Jong, más Pedri y Gavi, que son más interiores, pero readaptables. A lo largo de la temporada, Xavi ha empleado 14 de las 16 combinaciones posibles mezclándolos a todos. Solo ha desechado la opción Gavi-De Jong y Gavi-Pedri, la menos natural por ser los menos expertos.
Las parejas más utilizadas han sido las formadas por Romeu y Gavi y la compuesta por Gündogan y De Jong, con cinco partidos cada una, seguidas de Romeu-De Jong y Gündogan-Pedri con cuatro. Con todos los jugadores disponibles, la primera elección de la temporada (en Getafe) Xavi fue Pedri-Romeu y la segunda (Cádiz), Gavi-Romeu.
Se amplía el panel
La insatisfacción de Xavi y las lesiones que han ido incidiendo en la línea de centrocampistas ha ampliado el panel de combinaciones a la inclusión de Fermín, otro interior, para acompañar a Gündogan y De Jong, hasta desembocar finalmente en la elección de Christensen. En Vitoria le escoltó De Jong. Así, el equipo pudo tener más adelantados a Gündogan y Pedri, que son los mejores atacando el área. Como Sergi Roberto, que cuando ha sido utilizado estuvo en la parte superior del cuadrado que dibuja el Barça.
Gündogan dio la asistencia a Lewandowski en el 0-1 y anotó el 0-2 tras un centro de Pedri. El capitán de Alemania es el tercer goleador del equipo en la Liga (5), por detrás de Lewandowski (9) y Ferran (7) y por delante de João Félix (4) y Raphinha (3), dos delanteros con poca productividad.
El grave problema del Barça, en el fondo, con su millonaria inversión en la cantera, radica en no haber modelado ese recambio para Busquets pese al tiempo que ha tenido. Ni preparando a un joven a medida que ascendía en las escalas inferiores ni tampoco con los fichajes que ha efectuado para el filial. El problema sin solución. ■