El fiscal pide 36 años para un narco que embistió a dos policías
▶ El acusado de dos intentos de asesinato se lanzó en 2020 con un todoterreno robado contra un coche patrulla en Algeciras
El ataque contra una lancha de la Guardia Civil el viernes pasado por parte de una narcolancha en Barbate (Cádiz), que se saldó con dos guardias civiles muertos, no es el primero que registran las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en la lucha contra el narcotráfico en el campo de Algeciras. En 2020 un narco embistió con un todoterreno robado un coche policial sin dar tiempo a que los agentes que iban dentro pudieran salir. El impacto les produjo heridas que en el caso de uno de ellos, que quedó con una discapacidad declarada del 60%, aún no se han podido cuantificar de forma definitiva. La fiscal pide 36 años de cárcel para el conductor por el delito de atentado en concurso con dos asesinatos en grado de tentativa, , otro contra la salud pública y un tercero de tenencia ilícita de armas.
El escrito de calificación fiscal al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO explica que en la madrugada del día 5 de septiembre de 2020, sobre las 06.30 horas, se comunicó a la Comisaría de Algeciras que se estaba produciendo el desembarco de un alijo de droga por la zona de Getares-BalleneraFaro del término municipal de Algeciras. Los agentes se desplazaron hacia el lugar y detectaron que la droga era transportada por un todoterreno BMW que circulaba a gran velocidad hacia la carretera de Los Yankies.
Un vehículo policial Zeta con dos agentes, uno de ellos en prácticas, accedió a esa carretera. Los policías pudieron ver cómo el coche, que se aproximaba a gran velocidad, aceleró al ver el suyo. La vía no permitía el paso de dos vehículos, así que los agentes se echaron al lado derecho, lo que no impidió que el BMW conducido por el acusado Isaías Mora Santos, se dirigiera «directa y violentamente a embestirlos con el objeto de no ser detenidos con la droga que portaban en el vehículo y con conocimiento de la capacidad homicida del vehículo e intención de acabar con la vida de los agentes».
Los agentes intentaron salir del Zeta con rapidez, para ponerse a salvo, pero el todoterreno «impactó brutalmente contra la parte delantera izquierda (lado conductor), cuyo agente inspector (...) se encontraba bajándose del coche, siendo su cuerpo desplazado a unos metros del vehículo policial e impactando bruscamente contra la calzada». El copiloto, un agente en prácticas, al lanzarse del vehículo en el momento de la colisión sufrió también importantes lesiones por el golpe, señala el ministerio público.
Millón y medio por las secuelas
A consecuencia del impacto, el inspector, de 35 años, sufrió la «amputación parcial de miembro superior izquierdo con fractura de húmero», fracturas craneales diversas, de una pierna, de la muñeca y del pie, así como shock hemorrágico y contusión pulmonar. Pese al tiempo transcurrido desde entonces aún está pendiente de varias cirugías. «Dada la gravedad de las lesiones, más de dos años después siguen pendientes de sanidad y no se conoce aún el alcance de las secuelas», por lo que la fiscal solicita que, sin perjuicio del informe pericial definitivo sobre las lesiones que sufrió, los acusados le indemnicen con 1,5 millones de euros.
En el interior del BMW se encontraron un total de 17 fardos de hachís con un peso bruto de 556 kilogramos, valorados en 845.914 euros. La representante del ministerio público sostiene que no consta que el conductor participara en la sustracción del vehículo, así que no le pide pena alguna por ese delito. ■
El inspector sufrió la amputación parcial de un brazo, varias fracturas y un ‘shock’ hemorrágico