Las amenazas de Trump disparan el temor en la OTAN
▶ Las críticas al gasto de los aliados en defensa elevan la inquietud por su candidatura electoral
Las palabras pronunciadas el sábado por Donald Trump en un mitin sobre el gasto en defensa aliado, en medio de una guerra en Ucrania y las resistencias de su partido a seguir proporcionando ayuda militar a Kiev, han disparado de nuevo las alarmas entre los países de la Alianza Atlántica, ante el posible impacto para la seguridad común que tendría un segundo mandato de Trump.
ORIGEN DE LA CONTROVERSIA.
¿Protegería Estados Unidos en caso de ataque de Rusia a un país aliado? La pregunta, según contó
Trump, se la hizo el mandatario «de un gran país» que no desveló. Su respuesta demuestra que su forma de afrontar el debate del gasto en defensa aliado no ha variado ni un ápice durante estos últimos cuatro años desde que perdiera las elecciones: «¿No habéis pagado? (...) No, no les protegería. De hecho, les animaría (a los rusos) a hacer lo que les diera la gana. Hay que pagar las deudas», advirtió Trump en referencia al compromiso aliado, acordado en la cumbre de Gales en 2014, de destinar el 2% del PIB a gasto militar para 2024 y el 20% al gasto en capacidades militares. Un debate que, según fuentes aliadas, está «viciado» desde hace años al no tener en consideración la aportación que muchos países hacen a operaciones y misiones. Actualmente son 11 los países que han alcanzado el objetivo del 2%. España tiene previsto llegar en 2029.
CLÁUSULA DE DEFENSA MUTUA.
Desde el sábado las reacciones por el impacto de las palabras de Trump para la cláusula de defensa mutua recogida en el artículo 5 del Tratado de la OTAN se han multiplicado. ¿Qué dice este artículo? «Que un ataque armado contra una o más de ellas (naciones aliadas), que tenga lugar en Europa o en América del Norte, será considerado como un ataque dirigido contra todas ellas». Si tal ataque se produce, continúa, «cada una de ellas, en ejercicio del derecho de legítima defensa individual o colectiva reconocido por el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, ayudará a la parte o partes atacadas, adoptando seguidamente, de forma individual y de acuerdo con las otras partes, las medidas que juzgue necesarias, incluso el empleo de la fuerza armada, para restablecer la seguridad en la zona del Atlántico Norte».
REPRIMENDA DE LA OTAN, LA UE Y LA CASA BLANCA.
«Cualquier sugerencia de que los aliados no se defenderán entre sí socava toda nuestra seguridad, incluida la de Estados Unidos, y pone a los soldados estadounidenses y europeos en mayor riesgo», saltó en tromba el domingo el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que dejará el cargo después del verano. «Fomentar la invasión de nuestros aliados más cercanos por regímenes asesinos es atroz y carece de sentido», respondió la Casa Blanca. Y lo mismo el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, para quien «declaraciones imprudentes» que ponen en tela de juicio el artículo 5 «solo sirven a los intereses de Putin».
■