La inmersión lingüística en Catalunya desata una bronca en la Eurocámara
▶ Los grupos parlamentarios de la izquierda acusan a Montserrat de «instrumentalizar» por electoralismo la comisión de peticiones que preside
El informe preliminar sobre el modelo de inmersión lingüística de Catalunya, elaborado por la liberal estonia Jana Toom, generó ayer un duro rifirrafe y mucha bronca antes incluso de ser debatido. Aunque el documento fue distribuido entre los miembros de la comisión de peticiones del Parlamento Europeo con menos de 24 horas de antelación y solo en inglés, liberales, populares y extrema derecha impusieron su peso para impedir el aplazamiento y celebrar un primer debate en el que socialistas, verdes e izquierda acusaron a la dirigente popular Dolors Montserrat de «instrumentalizar» la comisión de peticiones que preside con motivos electorales.
«Sobran las razones para posponer este informe que va sobre reglas lingüísticas, pero no cumple con las reglas de procedimiento del Parlamento Europeo», se quejó sin éxito en varias ocasiones la socialista española Cristina Maestre aludiendo a las 16 horas de antelación con las que recibieron el texto, sin haber tenido tiempo para analizarlo. Lo mismo hizo la ecologista danesa Margrethe Auken en nombre de su grupo y la española Esther Sanz (Podemos) en representación de la izquierda, y criticaron también haber recibido el documento únicamente en inglés.
Molestos con la forma
Un argumento que esgrimieron también otros eurodiputados descontentos con que el texto llegara antes a la prensa que a sus buzones de correo y molestos además con la forma en que se orquestó la misión en Catalunya, que tuvo lugar entre el 18 y 20 de diciembre y que fue boicoteada por socialistas, verdes e izquierda por considerarla sesgada y partidista. «Me he sentido violenta durante esta misión porque los partidos de la mayoría como S&D y Verdes no participaron. Esto no ha sido positivo y no ha permitido hacer que el resultado de esta misión sea imparcial», apuntó la eurodiputada italiana del Movimiento 5 Estrellas, María Angela Danzi, que no está adscrita a ningún grupo político.
Danzi es una de las cuatro eurodiputadas que formaron parte de la misión junto a Toom, Peter Jahn (PPE) y el ultracoservador del partido polaco Ley y Justicia Kosma Zlotowski (ECR). A los cuatro les acompañaron además como observadores cinco españoles: Dolors Montserrat y Rosa Estarás (PP), Maite Pagazaurtundua (Cs), Jorge Buxadé (Vox) y Diana Riba (ERC). Muchos de ellos hablaron ayer. Algunos para pedir su retirada del orden del día. «Si es un problema tan de fondo y estructural no entiendo cuál es el problema de aplazarlo para que tengamos todas las garantías. Lo que ocurre es que hay elecciones en Galicia. El PP está en una situación complicada y el PP lo va a utilizar en los medios de comunicación», se quejó el socialista Ibán García del Blanco.
«Un ‘show’ mediático»
Pese a las múltiples quejas, la eurodiputada del PP se negó a cambiar el orden del día, argumentando que tenían que haberlo pedido con al menos 24 horas de antelación, y populares, liberales y ultraderecha avalaron su decisión. Durante el debate posterior, Riba acusó a Montserrat de utilizar sus competencias como presidenta de la comisión de peticiones para «un show mediático» de la derecha y la extrema derecha. Por parte de Junts, Toni Comín acusó a Montserrat de desprestigiar a la comisión de peticiones y negar la realidad: «El catalán está en retroceso» y «sin la inmersión irá a más». Mientras, el eurodiputado, de Vox, Jorge Buxadé, no dudó en calificar el modelo catalán de «apartheid lingüístico».
El texto final elaborado por la estonia, que todavía puede ser objeto de enmiendas hasta el 1 de marzo y será votado en la comisión de peticiones el 19 de marzo, pide un trato igualitario para catalán y castellano y avisa de que la Administración regional no garantiza un 25% de castellano en las aulas. Durante el debate en sí, que arrancó con casi una hora de retraso por la discusión de procedimiento previa, intervinieron 11 eurodiputados de los cuáles ocho eran españoles.
■