Israel asalta el mayor hospital del sur de Gaza y ataca el interior del Líbano
▶ El Ejército hebreo argumenta que dentro del complejo médico Naser podría haber rehenes secuestrados, pero no aporta pruebas
En la Franja de Gaza, la misma historia se repite. Pero no hay nada de ficción en ella. De nuevo, otro hospital gazatí fue evacuado y asaltado ayer por parte del Ejército israelí. Se trata del Hospital Naser de Jan Yunis, el mayor centro médico del sur del enclave palestino. Aunque el escenario es nuevo, el vestuario, el atrezzo y los personajes son los mismos: batas y uniformes sanitarios, junto a vendajes, ropas hechas harapos y bolsas desbordantes de objetos, llevadas por médicos, pacientes, heridos y personas desplazadas. El Ejército israelí contaría con información creíble de que los rehenes tomados el 7 de octubre podrían estar en la instalación. El resultado es igual: el terror en los rostros de adultos, niños y personal sanitario y el enésimo desplazamiento de los palestinos.
Culmina así el cerco de las fuerzas israelís al centro hospitalario Naser, que dura 25 días. Al menos 10.000 gazatís refugiados en el recinto médico lo evacuaron el martes. La situación es «catastrófica», con 1.500 desplazados, 190 trabajadores sanitarios y 300 de sus familias. Entre los enfermos, «hay 273 pacientes que no pueden moverse», 18 están en cuidados intensivos y 35 en diálisis, dificultando su evacuación. Lisa Macheiner, coordinadora de proyectos de Médicos sin Fronteras (MSF) en Gaza, denuncia que la orden israelí ha «forzado» a la población desplazada «a una situación imposible: seguir en el hospital en contra de las órdenes del Ejército y convertirse en objetivo potencial o salir del recinto a un paisaje apocalíptico».
Por ahora, el Ejército israelí no ha presentado pruebas de que Hamás mantuviera a israelís cautivos en Naser y que allí hubiera los cuerpos de algunos de ellos. Tampoco las ha facilitado de los hospitales Shifa, Rantisi y Amal, donde los atacó bajo argumentos similares.
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