El Barça de Grimau pide cita en el gran clásico de Copa
El equipo azulgrana aprovecha su mejoría para arrasar al Tenerife en Málaga y ganarse un puesto en la final frente al Real Madrid.
Barcelona Lenovo Tenerife
Satoransky (11), Laprovittola (7), Kalinic (2), Parker (5), Vesely (8) –cinco inicial–, Hernangómez (15), Da Silva (8), Jokubaitis (10), Brizuela (13), Nnaji (9), Abrines (10) y Parra (10).
Fitipaldo (5), Guy (12), Cook (7), Doornekamp (-) y Shermadini (9) –cinco inicial–, Salin (7), Fernández (3), Huertas (15), Abromaitis (16), Sastre (-) y Diop (2) . 14-16, 40-8, 24-24, 30-28.
El Barça disputará hoy la final de la Copa del Rey de baloncesto después de superar con autoridad a Tenerife en la segunda semifinal del torneo por 108-76 en un partido en el que los de Roger Grimau destrozaron a los insulares a base de triples, y en el que anotaron 40 puntos en el segundo cuarto, estableciendo el récord histórico de puntos anotados por un equipo en un solo periodo.
El Barça arrancó con una marcha más que Tenerife, de la mano de un activo e inspirado Jabari Parker, que sumó cinco puntos seguidos para un 7-0 inicial, roto con un triple de Kyle Guy. Logró Nikola Kalinic el 9-3, el marcador se aceleraba para el Barça, pero tras la canasta del alero serbio, Roger Grimau y sus jugadores se encallaron, además de no cerrar bien el rebote defensivo.
Un parcial de 0-10 para los de Txus Vidorreta obligó al técnico catalán a detener el partido, algo que le vino bien al conjunto azulgrana, al firmar una reacción de cinco puntos aportada entre Darío Brizuela, Rokas Jokubaitis y Willy Hernangómez. Pese a que el Barça recuperó la iniciativa en el marcador, un triple sobre la bocina final de cuarto de Tim Abromaitis, sirvió para que Tenerife cerrase el primer acto con ventaja en el electrónico (14-16).
Necesitaba el Barça algo más de garra, algo más de potencia en pista, y esa energía llegó con dos acciones de personal y canasta de Joel Parra y de Hernangómez. Sumó dos puntos más el azulgrana en los dos primeros minutos de periodo que obligaron a Txus Vidorreta a parar el duelo (21-16).
Un gran Satoransky
Si el inicio de partido del conjunto azulgrana había sido positivo, el del segundo cuarto fue todavía mejor. Willy Hernangómez castigaba la pintura contraria, siendo muy superior a Gio Shermadini. Brizuela también sumó desde el 6,75, y entonces llegó la aparición de Tomas Satoransky, que sumó siete puntos de manera consecutiva, agresivo en la defensa, para colocar el +15 (35-20) en el marcador.
Los insulares se quedaron sin acierto, y en la primera mitad de periodo, tan solo lograron sumar cuatro puntos. De nuevo, tiempo muerto de Tenerife, pero tras la salida, dos triples consecutivos de
Oscar Da Silva y Álex Abrines que ampliaban la renta a +21 (41-20). El Barça estaba acribillando a los insulares desde el triple. Fueron siete en el segundo cuarto. Los azulgranas anotaron 40 puntos, el récord histórico de puntos en un cuarto por un equipo. También en la diferencia de puntos, con ese +32 logrado (40-8). Un auténtico festival que hizo que Grimau y los suyos se fueran al descanso ganando por 30 puntos de diferencia (54-24).
La hipotética reacción de Tenerife pasaba por un inicio fulgurante de tercer cuarto, pero el Barça resistió, y tras los primeros tres minutos, la ventaja seguía siendo de +30 para los azulgranas (5828). Con el encuentro finiquitado, se vivieron varios momentos, cuanto menos, curiosos, por parte de la afición que seguía en el Carpena.
A los habituales cánticos de los equipos eliminados, o a la ola, se le añadió el mítico «Hola, Don Pepito, Hola, Don José». Sin ninguna duda, la nota divertida de la jornada, viendo que el partido no sufría cambios en su guion, y que un triple de Da Silva cerraba el periodo de nuevo con una ventaja de 30 puntos (78-48).
El último cuarto dejó un triple de Jan Vesely, la presencia de James Nnaji en pista, y una victoria final por 108-76 que confirma el buen momento que atraviesa el Barça, que esta Copa ha llegado en uno de los mejores tramos de la temporada, y que este domingo, ante el Real Madrid, tienen una oportunidad inmejorable, para sumar el primer título de la temporada.
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El Real Madrid se convirtió en el primer finalista de la Copa del Rey Málaga 2024 tras aplastar al Valencia Basket en un partido que no tuvo historia a partir del descanso. Los de Chus Mateo sacaron el rodillo para sacar de la pista al conjunto taronja a partir del tercer cuarto. El 32-16 de ese penúltimo periodo dejó la ventaja blanca en +25 antes del trámite de los últimos 10 minutos. Los blancos vuelven a la final copera para enfrentarse al Barcelona tras perderse la del año pasado.
Dominador de principio a fin con un juego coral que abrumó al equipo de Álex Mumbrú (Musa destacó especialmente con sus 18 puntos), el Real Madrid consiguió que los últimos 10 minutos fueran un mero trámite. Ya con más entretenimiento en la grada que en la pista. Pudo recortar distancia el Valencia Basket ante la relajación madridista, pero no estuvo ni cerca de poner en duda la victoria blanca.
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