El Barça se resarce a trompicones ante el Atlético de Madrid
Tras el empate del pasado miércoles frente al Levante, el equipo azulgrana se recompone en el Johan Cruyff gracias a las dianas de Salma Paralluelo y Vicky López.
Recomponerse no siempre es fácil. Hay decenas de dichos y frases optimistas que te recuerdan que de todo se sale. Vale, que sí, siempre hay una nueva oportunidad, pero no siempre uno está preparado para aprovecharla. A veces la dejas pasar, o lo intentas sin suficientes fuerzas como para estrujarla. Hay momentos en que no queda otra que quedarte ahí parado, sin poder hacer nada más, cogiendo esa coyuntura con la punta de los dedos. Y tampoco pasa nada.
Así se sintió el Barça ante el Atlético de Madrid (2-0). El encuentro llegaba al césped del Johan Cruyff en un momento delicado, que no dramático. Sin duda, un duelo de históricos. Dos conjuntos que están o han estado en lo más alto en la competición nacional. Mientras el Barça sigue líder incontestable, el Atlético intenta resucitar y volver a posicionarse como el rival a batir. El duelo en el Jo han era sin duda eso, una oportunidad para ambos. Pero, como decíamos, no siempre éstas se aprovechan.
El Barça salió blando. Pese a tener el control del esférico, esto no se convirtió en peligro de verdad para Lola Gallardo. Las culés acecharon la portería de la guardameta, pero más allá de un par de acciones, no revirtieron mayor dificultad. Por su parte, las rojiblancas abdicaron del balón sin perder la intensidad que las caracteriza. Pusieron la pierna sin miedo, a veces con una dureza excesiva, dejado a un Barça renqueante pocas opciones para construir.
El primer tiempo fue de esos que pasan sin más. De los que no hay highlights ni acciones destacadas, que pasan sin pena ni gloria. Hasta que un destello hizo brillar a todo el Johan Cruyff. Salma Paralluelo volvió a coger el balón, como tantas otras veces, dentro del área. Lo escondió y, con un lanzamiento despiadado, superó a Lola Gallardo. Las azulgranas lo celebraron sobre el silbato que señalaba el camino de vestuarios.
Suficiente para ganar
El Barça fue el último en volver al césped. Mientras las colchoneras estuvieron esperando casi cinco minutos a que pudieran reanudar el encuentro, las culés aprovecharon para reorganizarse. Era necesario un punto más de velocidad, de intensidad, para sobreponerse a la presión individual y asfixiante de las visitantes. Los minutos fueron pasando y se fueron encontrando más cómodas tras el paso atrás colectivo del conjunto madrileño. Sin embargo, encontrar huecos entre líneas se antojaba imposible para un Barça que no conseguía combinar con comodidad.
Giráldez decidió mover el once y, con la entrada de Vicky López, el equipo encontró el segundo. La futbolista, que ha recibido esta semana su primera convocatoria con la selección española, estaba en el sitio justo en el momento correcto. A Vicky le cayó del cielo un rebote de Lola Gallardo, que no consiguió rechazar el balón más que un par de metros por delante de la línea de gol, y, con un ligero empujón al esférico, batió a la guardameta.
En Barça no es que saliera re forzado más allá del resultado. El cansancio, tanto físico como mental, ha hecho mella en un conjunto que no tiene descanso. Ahora, con el parón des elecciones, poco podrán descansar. El calendario, otro enemigo a combatir. ■