El plan pionero de FP integrada en BCN obligará a cambios en cuatro institutos
La reorganización, que ha creado malestar, supondrá en algunos casos cierre de grupos y, en otros, apertura de nuevos. Los afectados denuncian «improvisación» y «mala comunicación» por parte del Consorcio de Educación.
Hay consenso en que la creación de centros integrales de Formación Profesional (FP) es una «buena noticia» –además de tratarse de una cuestión dictada por la propia ley–. Barcelona está siendo pionera en el despliegue del Plan de FP 2030, que incluye la creación de institutos de referencia, exclusivamente de FP y que concentran todas las especialidades de una misma rama así como toda la oferta, desde la FP básica a los grados medios y superior.
Esa avanzadilla de la capital catalana tiene una cara B: la del malestar en los institutos afectados por la «reordenación» que lleva implícita esa concentración en centros de referencia. Crear nuevas plazas siempre es celebrado –y más si es en centros con vocación de pioneros–, pero cerrar plazas en centros en los que actualmente se imparten estos estudios, no tanto.
Voces de los cuatro institutos afectados el próximo curso 24-25 denuncian «improvisación» y «mala comunicación» por parte del Consorcio de Educación de Barcelona, tanto hacia las familias como hacia el profesorado.
Desaparición por traslado
La parte peliaguda del plan es la desaparición por traslado de parte de la oferta en algunos centros ya el próximo curso, comunicada sin margen de negociación a escasos meses de ejecutarse. Es el caso del instituto Vall d’Hebron, La Guineueta y el Pablo Ruiz Picasso. Los tres, más La Bastida en Santa Coloma, en la misma situación, han convocado una manifestación para este miércoles en Barcelona para exigir que se detengan los cambios y que haya una negociación, según ha explicado este lunes el sindicato Ustec en rueda de prensa.
Aunque este curso afecta de golpe a un mayor número de centros, lo cierto es que esta reordenación empezó años atrás –con la creación de institutos como el Institut de l’Esport, aún sin edificio– y deben culminar en el 2030 con unos 25 centros integrados en la ciudad.
Como todos, Juan Carlos Bondia, vicepresidente de la Asociación Red de profesorado de formación profesional, celebra la creación de los centros integrados, pero está en contra del cierre de líneas públicas «en cualquier zona de la ciudad». «Por ejemplo, Imagen Personal es muy necesaria en varias zonas de la ciudad. No tiene ningún sentido centralizar esta oferta en un solo punto o dos en una ciudad tan grande como Barcelona. Lo que vemos es que primero publican una cosa, después la otra..., y tenemos ejemplos, como el del Institut de l’Esport, al que le prometieron un edificio y las obras están paradas», prosigue.
En el caso del Instituto Vall d’Hebron, se trasladarán algunos estudios como los de Gestión y Administración o los de Actividades Físicas, se cerrará el Bachillerato Artístico y se suprimirá la ESO. Además, recibirá a estudiantes de ciclos de Sanidad de otros centros para convertirse en el centro integrado en esta materia.
En cuanto al Pablo Ruiz Picasso, está previsto que el curso 25-26 acabe recibiendo a la familia profesional de Actividades Físicas y por tanto allí se ubicarán los alumnos de esta rama que estén en el Vall d’Hebron.
Los institutos Vall d’Hebron, La Guineueta, Picasso y La Bastida exigen una negociación
En contra de las formas
Desde el sindicato Ustec, la principal crítica que se hace al plan es que los cambios se han hecho «sin tener en cuenta a la comunidad educativa» y se han «comunicado mal» (ahí coinciden todos los críticos). «Así no», ha afirmado el responsable de FP del sindicato, Ra
«Trasladar los estudios puede causar el abandono prematuro», señala la Ustec
mon Roy, quien insiste en que no está en contra de crear centros integrados de FP, pero sí de la forma en que lo quiere llevar a cabo Educació porque supone cerrar líneas en centros públicos y hacerlo sin consenso social.
Además, añade, «no se tienen en cuenta los efectos que estos cambios pueden provocar en el alumnado vulnerable». «Trasladar los estudios de un centro a otro puede provocar el abandono prematuro de alumnos que no estén dispuestos, o no puedan, asumir los nuevos desplazamientos», prosigue.
Precisamente la lucha contra el abandono escolar fue uno de los argumentos dados por el Consorcio en su momento para hacer del Picasso un centro de FP, estrategia que va asociada a la reconversión de todas las escuelas de la Zona Nord de Nou Barris en institutos escuelas.
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