Collboni desencalla las cuentas 24 horas antes de la votación inicial
ERC pacta el sí al proyecto del gobierno del PSC. Los Comuns permitirán su primer trámite y que vayan al pleno municipal del día 22.
Todo indica que el gobierno del alcalde Jaume Collboni logrará hoy en la comisión extraordinaria de Economía que el proyecto de presupuestos para este 2024, retirado el pasado octubre ante la falta de apoyo, supere su primer trámite y sea aprobado inicialmente.
El texto contará por lo menos con los cinco votos favorables de ERC, que ayer desveló que ha cerrado un acuerdo con el PSC a cambio de su apoyo. Solo con el apoyo de ERC los números no garantizaban que el proyecto fuera aprobado inicialmente, pero Barcelona en Comú ha anunciado su posición, dejando claro que permitirá que las cuentas superen el trámite y vayan al pleno del próximo 22 de marzo. La portavoz de los Comuns, Janet Sanz, precisó que ese «permitir la tramitación» puede darse en forma de abstención o de voto a favor.
La posición de los Comuns tiene un sentido: explorar sus posibilidades de firmar un acuerdo tripartito de gobierno con el PSC y ERC. Si rechazan los presupuestos, da al PSC un motivo para justificar un pacto solo con los republicanos. En todo caso, Sanz consideró que sería «inexplicable» que los socialistas no apostaran por un tripartito si Comuns y republicanos están a favor.
«No esperaremos más», añadió, al considerar que con el mes que falta hasta el pleno hay tiempo suficiente para cerrar un acuerdo de gobierno entre las tres partes.
El voto del PP
Están claros el sí de PSC y ERC, y el no de Vox. Y aunque Junts no ha querido precisar su voto, lo previsible es que sea no, ya que la semana pasada el posconvergente Jordi Martí Galbis advirtió de que su grupo no negociará los presupuestos si no negocia a la vez un pacto de gobierno con el PSC. Un pacto que se veía cercano hace unas semanas, pero ahora la sociovergencia cotiza muy a la baja en el Ayuntamiento de Barcelona.
Así las cosas, el voto de Barcelona en Comú dependerá del PP. Si los de Daniel Sirera se abstienen, a Collboni le basta una abstención de los Comuns para que los presupuestos sean aprobados en comisión. Si los populares votan en contra, los de Ada Colau tendrán que votar a favor.
Una vez superado el trámite inicial, los presupuestos pasarán 15 días en exposición pública e irán al pleno del 22 de marzo. Ese día se sabrá si son aprobados definitivamente o si son rechazados.
Y entonces el alcalde deberá decidir qué hace: o mantener la prórroga para ampliar el presupuesto más adelante, lo que de entrada supondría perder 715 millones, o recurrir a una cuestión de confianza, un mecanismo que le permitiría aprobar el proyecto de las cuentas municipales sin tocar una coma del texto que presentó el gobierno.
30 días naturales
El sistema prevé que se abra un periodo de 30 días naturales desde que el texto es rechazado. A menos de que toda la oposición se una para elegir a un nuevo alcalde en ese periodo, el presupuesto queda automáticamente aprobado. Es una opción que ya emplearon Xavier Trias para los presupuestos de 2014 y Ada Colau para los de 2017 y 2018. El matiz de que las cuentas superen o no la comisión de hoy alteraría un tanto el calendario potencial. Si fueran derrotados en comisión, los 30 días naturales empezarían el 22 de marzo. Si hoy superan el primer trámite, la cuenta atrás se iniciará en el pleno de abril o en uno extraordinario convocado después del 22 de marzo. Existe la posibilidad de que ese día los Comuns también voten a favor y en consecuencia los presupuestos sean aprobados definitivamente por la vía ordinaria, pero se entiende que para ello los de Colau se tendrían que convertir en socios de un tripartito que por ahora no parece un plato deseable para Collboni.