Sainz ‘vuela’ con el Ferrari en el test de pretemporada de Baréin

Carlos Sainz cerró el segundo día de test de pretemporada en Baréin con el mejor tiempo en pista (1.29.921 minutos), a solo dos décimas del récord de la pole de Verstappen el pasado año en este escenario. El madrileño logró su crono con el compuesto más rápido de la gama Pirelli (C4), pero también con el neumático blando convencional estuvo delante. Su compañero Charles Leclerc lideró la tanda matinal hasta que una tapa de alcantarilla suelta en asfalto de Sakhir dañó el suelo de su monoplaza y obligó a la FIA a anticipar el final da sesión. La escudería de Maranello pudo constatar ayer que su SF-24 es un coche muy rápido y, por ahora, también fiable.

Después de la la exhibición de Max Verstappen en la jornada inaugural, cuando el tricampeón dejó a más de un segundo a sus perseguidores, cundió el desánimo en el paddock. «Si no hay más batalla con Max cuando empiece el Mundial, 24 carreras este año van a ser demasiadas», advirtió Sainz resumiendo la sensación general. Pero ayer las cosas cambiaron y en el box de Ferrari todo eran sonrisas de complicidad.

Alonso y la alcantarilla

Por la mañana, Leclerc marcó por dos veces un registro de 1.31, quedándose a 0,6 segundos del mejor tiempo de Verstappen el miércoles, dando esperanza a los tifosi y a todos los que esperan que el Mundial no sea otro paseo para el de Red Bull desde el inicio. En Italia se habla de que el SF-24 puede ser entre 0,6 y 0,8 segundos más veloz que el coche anterior.

Fernando Alonso, que al igual que el año pasado en Las Vegas fue el primer piloto en pasar e intuir la trampa de la alcantarilla, en el piano de la curva 11, logró esquivarla a diferencia de Leclerc y Hamilton. Sin embargo, la bandera roja le impidió completar su programa de trabajo con el AMR24 y solo pudo dar 31 vueltas en su segundo día al volante.

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