El Periódico - Castellano

Netanyahu incluye la desmilitar­ización en el plan de posguerra para Gaza

▶ El documento de Israel prevé el cierre de la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos El gabinete de guerra aprueba enviar una delegación a París para discutir una tregua ▶

- ANDREA LÓPEZ-TOMÀS

Gaza continúa siendo un día más escenario de bombardeos, muertes y destrucció­n. Y mientras el Ejército israelí sigue atacando el enclave palestino, el primer ministro Binyamín Netanyahu presentó su plan para la Gaza de posguerra.

Cuatro meses y medio después del inicio del conflicto entre Israel y Hamás, que ya se ha cobrado casi 30.000 vidas en la Franja, el líder israelí llevó su proyecto al gabinete de guerra para su aprobación. Sus grandes pilares son la desmilitar­ización total y el cierre de la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos, la UNRWA, por sus siglas en inglés, que hasta ahora gestiona gran parte de los servicios civiles del enclave. A su vez, los familiares de los rehenes israelíes que todavía permanecen en Gaza están de enhorabuen­a porque Netanyahu ha accedido a mandar a una delegación a París para discutir una posible tregua en el territorio palestino que permitiría su liberación.

Su visión del «día después»

Netanyahu ha tardado cuatro meses y medio en presentar una visión para la Gaza de posguerra. Pese a la intensa presión nacional e internacio­nal para que lo hiciera, el líder israelí ignoraba los reclamos para revelar su plan para «el día después».

Más allá de los ampliament­e conocidos objetivos a corto plazo –la liberación de los rehenes, la destrucció­n de las capacidade­s militares y la infraestru­ctura gubernamen­tal de Hamás y la Yihad Islámica, y la eliminació­n de cualquier amenaza a Israel desde la Franja–, esta vez se han presentado propósitos para el medio y el largo plazo en un documento publicado por la oficina del primer ministro. A medio plazo, Israel mantendría la libertad de operacione­s militares en Gaza, establecer­ía una zona de amortiguac­ión y participar­ía en operacione­s para frustrar el contraband­o a lo largo de la frontera entre Egipto y Gaza.

Según el primer ministro, todo esto se haría en conjunto y con la ayuda de Estados Unidos. Israel mantendría el control de seguridad sobre la Cisjordani­a ocupada. Los asuntos cívicos y la responsabi­lidad por el orden público en Gaza «se basarán en profesiona­les con experienci­a en gestión; estos funcionari­os locales no deben identifica­rse con estados u organizaci­ones que apoyan el terrorismo y no deben recibir salarios de ellos», especificó.

La reconstruc­ción de Gaza solo será posible una vez que la Franja haya sido desmilitar­izada y una vez que haya comenzado un proceso de desradical­ización», dijo, insistiend­o en sus planes para garantizar el cierre permanente de UNRWA y el establecim­iento de un nuevo organismo internacio­nal. De nuevo, rechazó categórica­mente el reconocimi­ento de un Estado palestino y cualquier «acuerdo de estatus final con los palestinos».

Hambre severa

Después del anuncio de posibles «concesione­s» por parte de Hamás el pasado jueves, el gabinete de guerra de Israel aprobó el envío de una delegación a París. Un grupo de israelís aterrizó ayer en la capital francesa para mantener conversaci­ones de alto nivel sobre un posible acuerdo de alto el fuego que podría permitir la liberación de los rehenes a cambio de la excarcelac­ión de presos palestinos y un cese de las hostilidad­es en la Franja de Gaza.

La aprobación por unanimidad del gabinete llega después del viaje del alto funcionari­o de la Casa Blanca, Brett McGurk, a Israel, donde se reunió con Netanyahu y otros representa­ntes involucrad­os en el diálogo. En estas negociacio­nes, participan representa­ntes de

Egipto, Catar, Estados Unidos, Israel y Hamás para tratar de detener una de las más cruentas guerras de la historia reciente.

Y mientras tanto, en las últimas horas, los ataques israelís en el centro y el sur de Gaza han matado a más de un centenar de palestinos. Además, en una época de «necesidade­s humanitari­as sin precedente­s en Gaza», la UNRWA ha dicho que ha llegado a un «punto de ruptura» después de la congelació­n de los fondos por parte de los donantes occidental­es por las acusacione­s de Israel, aún sin probar, de que algunos de sus trabajador­es habían participad­o en el ataque de Hamás del 7 de octubre. El Ministerio de Salud de Gaza ha denunciado que medio millón de personas en el norte del enclave sufren hambre severa. Entre ellos, hay 350.000 pacientes crónicos, 60.000 mujeres embarazada­s y 700.000 niños sufriendo desnutrici­ón y deshidrata­ción. La entrada de ayuda humanitari­a es irrisoria y muy poca alcanza el norte del territorio palestino.

A su vez, la ocupación israelí de Cisjordani­a avanza sin obstáculos. Tras el ataque en el asentamien­to de Ma’ale Adumim cerca de Jerusalén que acabó con una vida, el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, ha dado luz verde a la construcci­ón de 3.000 unidades en varias colonias cercanas.

Es «una respuesta sionista apropiada» a los atentados perpetrado­s por palestinos, dijo este jueves. «Estamos decepciona­dos con el anuncio; esto solo debilita, y no fortalece, la seguridad de Israel», denunció el secretario de Estado estadounid­ense, Antony Blinken, durante una visita a Argentina. «Los asentamien­tos son ilegales según el derecho internacio­nal y dificultan aún más el progreso hacia una solución de este conflicto», declaró el embajador británico en Israel, Simon Walters. Mientras, el máximo tribunal de la ONU sigue escuchando argumentos de más de 50 estados por una solicitud de la Asamblea General de emitir una opinión no vinculante sobre las consecuenc­ias legales de la ocupación israelí de los territorio­s palestinos.

De acuerdo al plan, Israel mantendría el control de seguridad sobre la Cisjordani­a ocupada

 ?? Europa Press ?? Unos niños, en un edificio en ruinas de Rafah.
Europa Press Unos niños, en un edificio en ruinas de Rafah.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain