El Athletic masacra al Atlético y completa la final de Copa
El equipo de Valverde vuelve a tumbar al de Simeone con goles de los Williams y Guruzeta. Los ‘leones’ pelearán por el título con el Mallorca.
De Williams a Williams, de Nico a Iñaki, de Iñaki a Nico. Símbolos ambos de una época, no solo del Athletic, también de Euskadi y de toda España. Cómo hemos cambiado. Por sus venas vascas de hijos de la inmigración africana circula la sangre de los Goikoetxea, Dani y Sarabia, de aquella última y lejana generación bilbaína que alzó una Copa del Rey en 1984. Han sido ya seis intentos fallidos, pero no desiste el Athletic, que ayer pasó por encima del Atlético (3-0) para brindarse un nuevo intento. Será el 6 de abril ante el Mallorca de, ironías de la vida, el Vasco Aguirre.
De Nico a Iñaki se redactó el trazo del primer gol. De Iñaki a Nico, el segundo. Y ambos se sumaron al que había anotado Berenguer en el Metropolitano (0-1 en la ida) para empezar a perfilar una nueva ilusión de gabarra, El Dorado bilbaíno. Guruzeta abrochó la goleada en la segunda mitad. Sin Griezmann,
Agirrezabala; De Marcos (Yeray, m. 89), Vivian, Paredes, Lekue; Prados, Galarreta (Dani García, m. 68), Iñaki Williams (Berenguer, m. 80), Sancet (Unai Gómez, m. 80), Nico Williams; Guruzeta (Raúl García m. 89). Técnico: Ernesto Valverde.
Oblak; Molina (Barrios, m. 53), Savic, Witsel, Hermoso (Reinildo, m. 53), Lino (Riquelme, m. 72); Koke (Saúl, m. 65), De Paul, Llorente; Correa (Memphis, m. 53), Morata. Técnico: Diego Simeone.
1-0 (m. 13), Iñaki Williams; 2-0 (m. 42), Nico Williams; 3-0 (m. 61), Guruzeta.
pero dio la sensación de que tanto hubiera dado con él, por mucho que sea uno de los grandes ogros modernos de San Mamés, el Atlético fue presa del extraño embrujo de este Athletic que alcanza su sexta final en los 15 últimos años.
Compitió durante un rato el equipo de Simeone, sí, hasta arrancó con más brío que su empoderado rival, pero hincó la rodilla en cuanto recibió dos zarpazos. Y nunca se creyó capaz de levantarse ni el Athletic se lo permitió. No encontró escudo el Atlético para protegerse de las estocadas que les propinaban los dos hermanos por los costados. Ni tampoco supo alzar un muro en su área para que las punzadas fueran indoloras. Esa legendaria solidez defensiva del cholismo hace tiempo que es historia. Y un magistral Ernesto Valverde supo sacar provecho ante la máxima asistencia de la historia de San Mamés: 52.061 espectadores.
Disturbios en la previa
Antes de que el balón echara a rodar, ya había noticia en San Mamés. Volvió a quedar patente que en el seno de la gran afición del Athletic hay un detestable grupúsculo de violentos. Forzaron a miembros de la Ertzaintza a refugiarse en el estadio para protegerse de una lluvia de objetos y agredieron a aficionados atléticos, algunos de los cuales sufrieron «heridas graves», según denunció su presidente, Enrique Cerezo.
Lo peor que tiene el Athletic dio paso a lo mejor, sus futbolistas, que confirmaron que su pésimo partido ante el Betis fue un mero desliz. Encajaron con concentración y eficacia el empuje inicial del Atlético y a los 13 minutos consiguieron morder al primer intento. Internada de Nico por la izquierda, centro al área y volea de Iñaki con la caña que sorprendió a Oblak. Los papeles se intercambiaron después y Nico firmó el 2-0. La segunda parte arrancó con un cuarto de hora de retraso por una emergencia médica en la grada, pero el Athletic no se inmutó y Guruzeta certificó la victoria.
■