Puig crece otro 19% y gana 465 millones antes de salir a bolsa
Tercer año consecutivo de crecimiento a doble dígito para Puig. El grupo familiar de perfumería, cosmética y maquillaje, entre otros productos de moda y belleza, vendió por valor de 4.300 millones de euros en 2023 y ganó, con semejante actividad, 465 millones de euros. Son crecimientos del 19% y del 16%, respectivamente, en relación con los volúmenes del año pasado, un avance que esta compañía califica de «extraordinarios» y que relaciona, en buena medida, con su estrategia de centrarse en la marca propia de alta gama.
De acuerdo con la nota enviada ayer, esta compañía responsable de marcas como Rabanne, Carolina Herrera, Jean Paul Gaultier o Nina Ricci, y que se ha hecho estos últimos años con el control de firmas como Carlotte Tilbury, Byredo, Loto del Sur, Kama Ayurveda o Dr. Barbara Sturm, sigue obteniendo casi tres cuartas partes de sus ingresos de los artículos de fragancias y moda. Destaca, en este sentido, que Rabanne ha supuesto por sí sola 1.000 millones de euros de ventas netas, pero que Jean Paul Gaultier ha sido la enseña de mayor crecimiento. Y, en general, que la cuota de mercado de Puig en este segmento crece hasta el 11% a nivel mundial, lo que implica que una de cada diez «fragancias selectivas» que se compran en el mundo las suministra esta empresa con sede en L’Hospitalet de Llobregat.
Oferta dermatológica
Un 17% de la facturación de la compañía corresponde a la venta de maquillaje y el resto (un 10%) procede de la dermocosmética. Con todo, esta última es el área que más crece respecto al año anterior, un impulso que el grupo relaciona con uno de los productos de Charlotte Tilbury (la Magic Cream), con la oferta dermatológica de base científica de Uriage y Apivita, y con la incorporación al negocio de las marcas Loto del Sur y Kama Ayurveda.
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