«Queremos espacio en la plaza del Macba»
La reforma de la plaza dels Àngels de Barcelona indigna a vecinos y ‘skaters’. Rechazan la ampliación del museo y que el proyecto suponga limitar la actividad de los patinadores.
El anuncio municipal, el pasado lunes, del inicio de las obras de reforma de la plaza dels Àngels, en el corazón de Ciutat Vella, ha indignado a los vecinos que se oponen desde hace años a uno de los elementos más relevantes de esa transformación: la ampliación del Macba que dará lugar a una nueva construcción, anexa al Convent dels Àngels, que ocupará casi 1.000 metros cuadrados.
Los planes del consistorio han molestado también a otro colectivo con una presencia notable en la plaza, los skaters. Porque el nuevo diseño parece perseguir que tenga que buscarse otro sitio para patinar, aunque no se haya dicho con estas palabras. Tanto los vecinos como los patinadores consultados denuncian que el consistorio no les advirtió de que iba a anunciar la reforma.
El alcalde, Jaume Collboni, explicó el pasado lunes que tanto las obras del que tiene ser el CAP Raval Nord, que estará en la Capella de la Misericòrdia, como los trabajos de ampliación del Macba empezarán este 2024. Y acabarán, respectivamente, durante el primer trimestre de 2026 y enero de 2027.
Así, si nada cambia, en tres años la plaza dels Àngels contará con las nuevas dependencias del museo, casi 1.000 metros cuadrados que hoy son espacio público en la plaza, y al otro lado, se reformulará el zócalo de la sede actual del Macba, que será un espacio verde de 1.105 metros cuadrados. Para el gobierno, esos metros son nuevo espacio público, a los que suma los 349 metros de miradores en la parte alta de la nueva ala del museo.
Plataforma contraria
Las explicaciones del alcalde no convencieron a la plataforma No a la ampliació del Macba. Sus integrantes denunciaron en un comunicado 24 horas después que la iniciativa del consistorio supondría la pérdida del espacio público, y acusaron al PSC de esgrimir como un éxito que el nuevo CAP esté en la Misericòrdia cuando los socialistas votaron en contra de esta posibilidad.
Julia Baquero, de 68 años y vecina de Ciutat Vella, es una barcelonesa nacida en Lleida. De niña vivió con su familia en una barraca de Montjuïc –«una barraca que era una casita, eh, teníamos gallinas y huerto», recuerda– y de adulta siempre ha vivido en el distrito, con la salvedad de un pequeño paréntesis en Gràcia y una estancia en Gales y Estados Unidos. Con sus padres, vivía en la calle de Sant Gil. Ahora es vecina de la de las Carretes.
Administrativa en la UB, ya jubilada, forma parte de la plataforma contraria a la ampliación del Macba, en la que, subraya, conviven vecinos y skaters. Ha participado en las luchas de los últimos años de Ciutat Vella, que son muchas, y está dispuesta a dar de nuevo la batalla por la plaza: «Si esto sigue adelante, las movilizaciones serán fuertes. Quitarnos 1.000 metros cuadrados en el barrio más denso de Barcelona. ¡Que no!».
«No hay una razón para ampliar el Macba. Es un despropósito total. Tienen 2.000 metros cuadrados que no utilizan, que emplean para eventos. ¿El mirador? Lo queremos a pie de calle», afirma sobre el anuncio municipal. «Han consultado con parte del vecindario, pero no con la plataforma», denuncia.
La plataforma subraya que hay un contencioso administrativo presentado por los vecinos contra la ampliación, que debe dirimirse para que puedan empezar las obras. Recuerda que ya presentaron alegaciones a un plan de mejora urbana.
Baquero considera que anunciar una reforma que deja sin espacio a los skaters sin ni citarlos ni hablarlo con ellos, no es de recibo. «Sacar a alguien a la brava no es una actitud propia de un ayuntamiento democrático. Queremos que en la plaza haya espacio para los vecinos, la gente mayor, los jóvenes, los niños y los patinadores. Una vez estemos seguros de que la ampliación no se hará, hablemos de cómo se hará la plaza, de sus usos». «El espacio público es público, el ayuntamiento no es su amo, lo tiene que gestionar», concluye.
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