«¡Pásalo!», el mensaje viral que cambió unas elecciones
El mensaje viral con mayor impacto en la historia de España se produjo mucho antes de que existiera Whatsapp o Twitter. Incluso, antes de que se oyera hablar de Facebook. Fueron 160 caracteres escritos tras el mayor atentado en suelo español, el 11M, que se viralizaron a través de SMS para convocar una manifestación ante las sedes del PP por las mentiras sobre la autoría del ataque.
Enviar la primera remesa de mensajes telefónicos que cambiaron el rumbo de unas elecciones generales costó cerca de cinco euros. Dos décadas después, EL PERIÓDICO reconstruye lo que ocurrió en aquellos días.
El 11 de marzo de 2004, a las 7.36 horas, se produjeron diez explosiones en cuatro trenes de Madrid. Murieron 192 personas y cerca de 2.000 personas resultaron heridas. El Gobierno de José María Aznar señaló desde un principio a ETA e, incluso cuando Al Qaeda se atribuyó el atentado, siguieron manteniendo como principal hipótesis a la banda terrorista. Mucha gente, a través de foros y blogs, fueron mostrando sus dudas y compartiendo información de medios extranjeros.
Al día siguiente, en la manifestación convocada por el Gobierno bajo el lema Con las víctimas, con la Constitución, por la derrota del terrorismo, se vieron pancartas de No a la guerra y ante carteles electorales de Mariano Rajoy se gritó «Por vuestra culpa, España está de luto». Aquella indignación por las mentiras del Ejecutivo popular no se reflejó en la cobertura que hizo TVE de aquella movilización. Y esa fue la gota que colmó el vaso.
Silencio por la verdad
El 13M, sábado y día de reflexión, empezó a correr de teléfono en teléfono un SMS de 160 caracteres. «¿Aznar de rositas? ¿Lo llaman jornada de reflexión y Urdaci trabajando? Hoy 13M, a las 18h. Sede PP, c/Genova 13. Sin partidos. Silencio por la verdad. ¡Pásalo!», decía. Durante 20 años, la identidad de la persona que redactó y envió el primer mensaje se ha mantenido oculta.
Ahora, Víctor Sampedro, catedrático en Comunicación Política en la Universidad Rey Juan Carlos, desvela que el autor fue Emilio Sil
Una treintena de SMS sirvieron para concentrar a miles de personas ante las sedes del PP para protestar por la desinformación y las mentiras sobre la autoría de los atentados, que el Gobierno de Aznar insistía en atribuir a ETA. Los electores le castigaron por ello y dieron la victoria a Zapatero.
va, ya entonces presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica.
Tras hablarlo con dos colegas, ambos profesores universitarios, y hacer algunos ajustes al texto, Silva lo remitió a 12 personas, uno de sus amigos a ocho y el tercero a diez. Un total de 30 SMS que iniciaron la movilización. La convocatoria reunió a 7.000 personas en Madrid y otras 7.000 en Barcelona, ante la sede del PPC en la calle Comte d’Urgell. Hubo manifestaciones en otras diez capitales.
Entre las personas que se manifestaron en la calle Génova y después recorrieron las calles de Madrid hasta las 06:00 horas estaba Coral Herrera.
«Nos estáis mintiendo»
«Estaba rodeada de gente muy mayor, de 70 u 80 años. Estábamos todos conmocionados y gritando es mentira, nos estáis mintiendo, queremos la verdad », rememora con bastante emoción.
Coral llegó allí a través de un SMS. No había acudido a la manifestación del 12M ante las dudas que ya tenía sobre ETA, pero decidió protestar ante la sede del PP: «Para mí fue muy significativo el darme cuenta de cómo los medios de comunicación se adherían al relato del Gobierno y cómo en las calles había un sentimiento de indignación fortísimo».
De aquellas horas recuerda el ir recibiendo información por la radio y por SMS de amigos que vivían en el extranjero y que avisaban que la autoría de Al Qaeda se daba por confirmada en otros países. También escuchó allí las declaraciones de Rajoy, denunciando al PSOE por convocar esas manifestaciones: «En ese momento no éramos votantes del PSOE, los que estábamos allí éramos el pueblo. Este movimiento sí que me hizo sentir que podíamos tumbar a un Gobierno entero».
Un bulo como pocos
Sampedro, que acaba de publicar el libro Voces del 11M Víctimas de la Mentira, explica que aquella movilización fue posible porque el tejido social madrileño llevaba «autoconvocándose a manifestaciones masivas» durante toda la segunda legislatura de Aznar.
El ejemplo más claro fueron las concentraciones del No a la Guerra. «Lo que demostró el 13M fue que el sistema político-informativo había sido desbordado porque existía un agente con capacidad comunicativa suficiente como para recibir, vía correo electrónico o SMS, la información de la prensa internacional y generar contrainformación», sostiene.
Para Sampedro, las continuas alusiones a ETA «desembocan en un bulo, en un bulo que es longevo como pocos y de una dureza ine
Emilio Silva, líder de una asociación para la memoria histórica, mandó el primer mensaje
Los mensajes de personas que vivían en el extranjero advertían de la autoría de Al Qaeda
narrable». «Lo que ocurre es que la gente sabe que le están mintiendo. Tiene constancia de que la información en el extranjero es antagónica a la que se dice aquí. Que nadie en el extranjero da la más mínima verosimilitud a un atentado etarra», recalca.
Aquella indignación que recuerda Coral, canalizada en esa manifestación a través de SMS, tuvo una repercusión en las elecciones del domingo 14 de marzo.
El PP tenía el viento a favor, pero los ciudadanos le castigaron. Rajoy logró el 37,71% de los votos y 148 escaños frente al 42,59% de José Luis Rodríguez Zapatero, que se tradujo en 164 diputados. Sin embargo, Sampedro niega que la derrota del PP fuera relevante: «La importancia del 13M fue conferir legitimidad a aquellas elecciones. Los resultados del 14M son y serán válidos en la historia de España porque la gente salió a la calle a reclamar la verdad. Si esa gente no hubiera salido a señalar la mentira oficial, se podría decir que los resultados son ilegítimos, habiendo ganado quien fuera».
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