La presión del agua ya baja en seis municipios del área de BCN
El AMB prevé extender paulatinamente estas medidas de reducción a otras ciudades en función de la emergencia por la escasez de agua.
Ayer se empezó a aplicar la bajada de presión del agua en seis municipios del área de Barcelona. El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) anunció el pasado 28 de febrero que podría en marcha esta medida para combatir los graves efectos de la sequía que azota Catalunya y por la que la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) ha declarado el estado de emergencia.
El objetivo, dice la Administración metropolitana, es bajar la dotación al máximo «con la finalidad de alargar los recursos en la medida de lo posible por si la situación no mejora a medio plazo». Así, ayer arrancó la reducción de la presión de la red en los municipios de Begues, Cervelló, Corbera de Llobregat, La Palma de Cervelló, Sant Vicenç dels Horts y Sant Just Desvern, todos ellos en la comarca del Baix Llobregat.
Falta por sumarse a la lista Tiana, localidad que se ubica en la parte sur del Maresme y donde la aplicación de la caída de presión arrancará la semana que viene, explicaron fuentes del AMB. En un origen, el planteamiento del AMB era que esta bajada se aplicara de forma más quirúrgica, es decir, que no funcionase en todo el término, sino en los barrios o zonas con mayor consumo detectado. Sin embargo, por ahora, la puesta en marcha de la medida ha sido generalizada «en todo el municipio» y «en todos los casos». Así, «en los próximos días o semanas se irá tratando de ajustar y acotar más», añadieron.
El actual estado de emergencia por la sequía limita el consumo a 200 litros de agua por persona y día, algo que deben controlar los ayuntamientos, bajo la amenaza de multas. Así, estos siete municipios se encontraban por encima de este consumo o estaban cerca de alcanzarlo, motivo por el que se acordó esta bajada de presión.
En caso de continuar la situación actual de sequía, el AMB prevé extender paulatinamente estas medidas de reducción de presión a otras localidades, priorizando los que tienen las dotaciones más elevadas. «La evolución de los próximos meses permitirá decidir los municipios afectados», informó el ente.
Con carácter general, al AMB recuerda que la presión de la red de agua está ya ajustada en el área metropolitana a «los límites más bajos que permite el reglamento del servicio metropolitano del ciclo integral del agua». «La inminente reducción de presión por debajo de estos valores límite del reglamento puede tener algún efecto en el servicio en función de distintos factores, especialmente si se aumenta el consumo respecto al actual. Con un consumo reducido y similar al actual, las afectaciones serán mínimas y no destacables», explica el AMB.
Consultadas por este diario hace poco más de un mes, algunas de las localidades sobre la que ya se cernía la bajada de presión apuntaban a un gran número de fugas en el sistema de distribución de agua, unas averías «difíciles de detectar y reparar». Otras añadían a la ecuación el gran número de casas unifamiliares dentro de su término municipal, algunas de las cuales disponen de jardín y piscina.
Una carta a los que gastan más
En la misma línea, el Área Metropolitana explicó ya en febrero que iba a enviar al conjunto de usuarios domésticos que tienen un consumo superior a 200 litros por habitante y día (el límite marcado por la primera fase de emergencia) una carta en la que «se pide aumentar los esfuerzos para reducir el consumo de agua y aproximarlo a la media actual del área metropolitana». Esto incluye a unos 24.000 abonados domésticos, el equivalente al 1,5% del total de abonados del área metropolitana.
Además, en la carta también se recordará que, hay actuaciones prohibidas como llenar piscinas privadas, regar jardines particulares y lavar vehículos (excepto en sitios autorizados).