Nueve meses después
El canterano Fermín y el cedido João Cancelo representan el ejemplo de un Barça ‘low cost’ y que se convirtió en el primer equipo de la Champions en jugar una eliminatoria con dos menores de edad. Cubarsí, que debutaba, fue el MVP. Aquello que se gestaba en julio verá la luz en abril en Europa.
Fermín López fue la primera sensación de la temporada con el golazo que marcó ante el Real Madrid en la gira de Estados Unidos. Nacía un nuevo Barça, entonces de futuro y prestaciones desconocidas. Un chaval onubense de El Campillo que llenaba la convocatoria tras una cesión al Linares se exhibía con todo su desparpajo con un gol por la escuadra y una asistencia a Ferran Torres.
João Cancelo fue el último fichaje del mercado, llegado con João Félix para completar la plantilla. Un regalo a coste cero deseado por Xavi desde enero (recuerden el desencuentro con el City de la abortada cesión invernal) y que ha aportado cuatro goles que ha paliado la sequía del equipo.
Símbolos del nuevo Barça que se gestaba, entonces de porvenir desconocido y prestaciones imprevisibles, confeccionado desde la precariedad, pero que verá la luz nueve meses después. Un low cost ejemplar que no ha acomplejado a la hinchada, conmovida por el esfuerzo de sus muchachos pese a las limitaciones. Nadie falló a la desesperada noche frente al Nápoles. Acudió más gente que nadie (50.301 espectadores), hasta batir el récord de asistencia frente al Madrid (50.112) .
La conmovida hinchada azulgrana batió el récord de asistencia que se registró en el clásico
Desde 2009
La suerte de la temporada de este nuevo Barça, capaz de marcar dos goles en 20 minutos en una eliminatoria de Champions desde que lo hiciera en 2009 y ante el Bayern, quedó en manos del primer equipo de la historia que alineaba dos menores de edad de salida.
No eran dos acompañantes, sino dos futbolistas relevantes de ahí que fueran titulares en posiciones muy sensibles, delicadas, de aquellas que tienen un foco colgante. Pau Cubarsí (17 años) defendió como un lobo el primer ataque del Nápoles, nacido en el saque de centro, y ganó el duelo al ogro Osimhen y antes del cuarto de hora dio un pase vertical hacia Fermín que no ha dado un defensa del Barça en cinco años. Le concedieron el premio al mejor del partido, y con eso está dicho todo, el día de su estrenó en la Champions. Lamine Yamal se escapó todas las veces de Mário Rui, hasta que el portugués entendió que sólo podría anularle vía intimidación o con la astucia del experto; es decir, a trompadas o con triquiñuelas. No llegaba a tiempo de pillarle pero frenó su ímpetu arrancándole una tarjeta.
Dos oportunidades más
Lamine tenía la última oportunidad de sellar un nuevo récord si batía a Meret. Le convertía en el goleador más joven de la historia, superando a Ansu Fati. No lo logró, pero entre todos ganaron tiempo con otra eliminatoria y dos oportunidades más para el niño.
El nuevo Barça acabó apoyándose en aquellos que también fundaron algo nuevo un día. Sergi Roberto y Romeu se juntaron con los otros viejos de la plantilla para que lo que se gestaba en julio se vea nueve meses después en Europa. ■