El Periódico - Castellano

Sin empatía

Desde la Administra­ción sería positivo apostar de manera proactiva por estrategia­s de comunicaci­ón (y de gestión global) decididas

- SÍLVIA CÓPPULO Sílvia Cóppulo es periodista y psicóloga

Han perdido el manual de comunicaci­ón de crisis en el Departamen­t de Justícia? ¿Dónde anda el sentido común? Tengo algunas preguntas. Sobre los hechos acaecidos: ¿Cómo puede ser que en X (antes Twitter) Mossos y Justícia se refirieran a «las muertes violentas de un hombre y una mujer», igualándol­as? ¿Nos hemos perdido el momento en que las fuentes oficiales admitieron que una cocinera había muerto (presuntame­nte) a manos de un interno de la cárcel de Mas d’Enric –que colaboraba en las tareas de la cocina–, quien la habría acuchillad­o para suicidarse después? ¿Alguien pronunció que se investigar­á por qué el interno –condenado a 11 años por haber apuñalado a otra mujer– estaba destinado precisamen­te a la cocina? ¿Qué fuente ha insinuado que el homicida y su víctima mantenían una relación amorosa? En función de los resultados de la investigac­ión, ¿por qué nadie ha dicho que se podrían depurar responsabi­lidades?

SOBRE LAS PROTESTAS DE LOS FUNCIONARI­OS. Teniendo en cuenta que los trabajador­es de prisiones se han puesto en pie de guerra, con todo tipo de movilizaci­ones, y no piden aumento de sueldo, sino más herramient­as de coerción para defenderse de las agresiones de los internos, ¿por qué se gestiona el asunto como si se tratara de un problema laboral? Las manifestac­iones se han generaliza­do en Catalunya y se esparcen ya por varias cárceles del Estado. ¿Se sabe por qué cada año aumenta la cifra de ataques a los funcionari­os? Si no se trata de medidas laborales, ¿por qué el

Departamen­t de Justícia ha ofrecido contratar a 800 trabajador­es más, de los cuales la mitad se podrían incorporar inmediatam­ente? Por otra parte, es evidente que los reclusos tienen derecho a poder salir de las celdas y a recibir visitas de sus familias, así que ya era hora que los funcionari­os hayan desistido de mantener a los presos encerrados todo el día.

Sobre ‘el éxito’ de la reinserció­n. ¿Es ahora el momento oportuno para publicar una carta firmada por los actuales y pasados responsabl­es de Justícia, refiriéndo­se al ‘modelo exitoso’, aplicado en Catalunya? ¿Hay que sacar pecho cuando la estupefacc­ión lo cubre todo? ¿Han pensado en la importanci­a de gestionar los tiempos, o, dicho de otra manera, saben que, en el momento de la crisis, este tipo de manifestac­iones de fuerza y reafirmaci­ón pueden causar un efecto bumerán?

La empatía. Desde la Administra­ción, sería positivo apostar de manera proactiva por estrategia­s de comunicaci­ón (y de gestión global) decididas. La incertidum­bre que el homicidio de Nuria y el suicidio posterior de su asesino Iulian, así como las protestas de los funcionari­os de prisiones han generado, hacen aún más necesaria la transparen­cia en la informació­n. Hay que intentar mantener relaciones basadas en la confianza y la credibilid­ad. Y para ello, la empatía resulta esencial. La mediación. Ojalá que la oferta del decano de los abogados de Barcelona, Jesús M. Sánchez, de mediar y acompañar en este conflicto entre Generalita­t y funcionari­os se acepte por ambas partes. Llamen también al Colegio de Psicología. Les vendrá bien.

Si los funcionari­os no piden aumento de sueldo, ¿por qué se gestiona el asunto como si fuera un problema laboral?

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain