Sonidos animales en la Bienal de Venecia
Catalunya presenta el proyecto audiovisual inmersivo ‘Bestiari’, del artista Carlos Casas y la comisaria Filipa Ramos, una instalación para la que han registrado y grabado en 11 parques naturales catalanes.
Un hombre se duerme en el bosque y al despertar descubre que es capaz de entender el lenguaje de los animales. Esa es la parte buena. La no tan buena es que entonces una asamblea de animales, cuyo portavoz es un asno, le somete a juicio y le cuestiona, a través de 19 argumentos, el antropocentrismo y la superioridad humana sobre el resto de seres vivos. Es el argumento de La disputa de l’ase, texto medieval escrito en 1417 por el mallorquín Anselm Turmeda, considerado uno de los fundadores de la literatura catalana, con el que demostró una conciencia pionera hacia el medio ambiente y la defensa de la naturaleza. Es la historia que inspiró al artista y cineasta barcelonés Carlos Casas para crear Bestiari, el proyecto audiovisual, comisariado por la doctora en Filosofía Filipa Ramos y producido por el Institut Ramon Llull (IRL), que del 20 de abril y hasta el 24 de noviembre representará a Catalunya en la 60ª edición de la Bienal de Arte de Venecia, dentro del programa Eventi Collaterali.
Silbidos de serpientes y de delfines de la costa catalana, gritos de ecolocalización de murciélagos, el sonido de baja frecuencia de los elefantes y el de las cotorras, abejas y asnos mapearán un paisaje sónico junto a imágenes visuales de estos siete animales. Algunos de esos sonidos son del archivo de Casas pero la mayoría han sido o están siendo grabados en 11 parques naturales catalanes como los del delta del Ebro y el cabo de Creus (excepto, claro, el de los paquidermos, un homenaje de Casas a la imaginación del bestiario de Turmeda). En la instalación inmersiva ideada por el artista todos resonarán a través de «altavoces monumentales que funcionarán como esculturas cargadas de vida», explica la comisaria.
Experiencia hipnótica y sensorial
La intención es sumergir al visitante en una experiencia hipnótica y sensorial, para «que pueda relajarse, sentirse entre la vigilia y el sueño, experimentar la sensación de estar en el bosque del protagonista de Turmeda y despertarse y entender ese lenguaje más allá de las formas tradicionales de comunicación», señala Casas.
La propuesta de la comisaria se hace eco del tema de la Bienal, Foreigners Everywhere (Extranjeros en todas partes). «En un momento en que la xenofobia y la rabia contra el diferente, contra el inmigrante, está por todas partes e impregna los discursos autoritarios y de extrema derecha, que ponen al extranjero en la picota, Bestiari intenta darle la vuelta al tema. Lleva el concepto de extranjero a la humanidad, situando al otro en la naturaleza y la animalidad y estableciendo nuevas formas de relación con la humanidad, que hoy es una forma de barbarie contra el ecosistema y contra nosotros mismos», señala Pere Almeda, director del IRL.
La instalación, según Ramos, «busca raíces en el pasado para encontrar esperanza en el futuro» y pretende ofrecer «experiencias poéticas, políticas y sensoriales» que conduzcan a ver Catalunya «como territorio donde el compromiso conciliador y no el antropocentrismo con el mundo es posible».
En Bestiari, proyecto elegido entre 29 por un jurado presidido por Elvira Dyangani Ose, directora del Macba, se sobreponen tres dimensiones, detalla Casas. «Una medieval, donde el texto de Turmeda resurge contemporáneamente; otra, la vida de los parques naturales catalanes, donde se han grabado estos animales, y cuyo estado real se sentirá en Venecia; y una tercera perceptiva, con el sonido como herramienta básica de comunicación entre especies y que nos permite conocer nuestro entorno».
Para presentar Bestiari, Casas y Ramos se desplazaron ayer al Parc Natural i Reserva de la Biosfera del Montseny, donde les esperaba una pieza clave para el proyecto, el especialista en grabación de sonido y música Chris Watson, quien había desplegado en plena montaña, rodeado de árboles, un micrófono capaz de captar los sonidos llegados de todas las dimensiones y de realizar grabaciones infrasónicas, de frecuencias inaudibles para el oído humano.
En la Bienal se proyectará además un vídeo con imágenes de esos ambientes y de las especies que los habitan y que concluirá con la voz de la pianista y cantante Marina Herlop. La voluntad es que tras Venecia, el proyecto pueda mostrarse en Catalunya.
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A Casas le inspiró un texto medieval de Anselm Turmeda en el que un asno juzga a un humano