El Palacio de Kensington, repleto de con flores para Kate Middleton

Los sentimientos de tristeza, comprensión y solidaridad con la princesa de Gales predominan a las puertas de su residencia oficial, el Palacio de Kensignton, después de que esta anunciara que está siendo tratada por un cáncer. Turistas y curiosos se acercaron ayer a Kensington y también al cercano Palacio de Buckingham, donde se pudieron ver ramos de flores y tarjetas con buenos deseos para Kate Middleton.

La barcelonesa Julia Dalmau, de 22 años, era una de las personas que se desplazaron ayer hasta el palacio donde reside la princesa de Gales para mostrar su pesar por la noticia, que le sorprendió en el aeropuerto de camino a Londres, donde pasará unos días de vacaciones. Desde las puertas de la residencia real, la joven reflexionó acerca de la espiral de especulaciones desatada en los meses en los que se desconocía su estado de salud: «La gente puede llegar a ser muy mala, sobre todo con esos temas tan delicados. Los niños son pequeños y ella es muy joven; la situación es muy complicada».

«Lo siento por los hijos»

«Lo siento especialmente por los hijos. Es muy difícil porque aún son muy pequeños. Su madre está enferma y quizá no lo entienden», dijo a Efe el británico Ian Ferguson. Expresó además su confianza en que los niños no tengan que vivir la misma experiencia que su padre, Guillermo, con la muerte de su madre en accidente de tráfico en París cuando él solo tenía 15 años.

Para Susan Walsh, otra de las visitantes que peregrinó ayer al Palacio de Kensington, Middleton fue «muy valiente» al salir en público a anunciar su diagnóstico de cáncer, aunque consideró «muy triste» que tuviese que hacerlo para confrontar todas las teorías de la conspiración que se habían extendido. «Deseo que ahora la dejen en paz para seguir con su tratamiento, especialmente porque tiene niños pequeños y es un miembro muy público de la familia real», rogó la mujer.

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