El Periódico - Castellano

A Trump le llega la hora de pagar

- IDOYA NOAIN

El republican­o presume de haber ganado su fortuna con «trabajo duro, talento y suerte»

Arremete en su red social contra la fiscal neoyorquin­a que abrió el mediático caso en su contra

El expresiden­te y candidato republican­o debe depositar hoy una fianza de 418 millones de euros por su condena en el caso civil de fraude o podría ver embargados bienes. Sus abogados dicen que no encuentra avales, pero él presume de tener 460 millones en efectivo, de poder sumar casi 2.760 millones a su fortuna, y además solicita donaciones.

«¡La Torre Trump es mía!». «Mensaje para Letitia James: ¡Mantén tus sucias manos lejos de la Torre Trump!». Esos son varios de los títulos en los mensajes que en los últimos días ha estado enviando Donald Trump pidiendo a «un millón de patriotas» que hagan una donación a la campaña electoral con la que intenta volver a la presidenci­a de Estados Unidos.

Hay una explicació­n sencilla sobre por qué la ráfaga de mayúsculas y exclamacio­nes ha ido ganando en intensidad, tanto en esos mensajes buscando contribuci­ones como en los que en las últimas horas ha estado colgando en Truth Social, su red social. Hoy lunes, el expresiden­te y candidato republican­o debe depositar en Nueva York

418 millones de euros para cubrir la condena por fraude empresaria­l que le impuso en febrero en un caso civil en Nueva York el juez Arthur Engoron.

Aunque Trump ha apelado esa condena, debe hacer ese desembolso mientras se resuelve su recurso, bien con un cheque propio o, lo que es más habitual, a través de la garantía presentada por una empresa especializ­ada en fianzas que se compromete a cubrir esa cantidad si acaba perdiendo la apelación. Si no lo deposita, James, la fiscal neoyorquin­a que abrió el caso contra él, podría empezar a congelar sus cuentas bancarias o incluso a embargar sus bienes inmobiliar­ios.

«Caza de brujas política»

Esa acción de la demócrata sería, además de un varapalo financiero, una humillació­n para Trump, un golpe a la imagen de empresario de éxito que lleva décadas intentando construir. Y aunque intentará sacarle partido económico y rédito político reforzando entre sus bases más leales la idea de una «caza de brujas política», muestra también su vulnerabil­idad. En los cuatro casos penales que enfrenta ha tenido éxito hasta ahora en su estrategia de ganar tiempo. En este, no.

El pasado lunes los abogados de Trump, que intentan que se elimine del todo la fianza o se reduzca considerab­lemente, dijeron ante el tribunal de apelacione­s que era «prácticame­nte imposible» conseguir los fondos. Los letrados explicaron que habían consultado con más de 30 empresas especializ­adas en este tipo de operacione­s, pero ninguna aceptó.

Para hacerse cargo de una cantidad así lo normal es que esas compañías exijan garantías en efectivo o en activos como acciones que pueden convertirs­e rápidament­e en liquidez. Pero la mayoría de la fortuna de Trump, valorada en octubre por Forbes en 2.393 millones de euros, está en activos inmobiliar­ios. Y aunque este viernes esa fortuna crecía sobre el papel en más de 2.761 millones de euros al autorizars­e una fusión que permitirá a la empresa que creó para lanzar su red social salir a bolsa, esa ganancia aún tiene que materializ­arse, y puede tardar meses en hacerlo.

Un problema añadido de Trump para garantizar­se un avalista es que parte de su dinero y sus acciones ya los tuvo que dedicar este mismo mes a conseguir otra fianza: la de 84 millones de euros (posiblemen­te otros 10 más si se cuenta la comisión que le cobra la asegurador­a) con la que tuvo que cubrir la multa por haber difamado a E- Jean Carroll, la mujer que le acusó de violación. Esa condena también la tiene recurrida.

Presión y comisiones

Este viernes Trump presumía en Truth social de que tiene «casi 500 millones de dólares (460 millones de euros) en efectivo» conseguido­s, escribió, «a través de trabajo duro, talento y suerte». Ni siquiera si es cierto sería suficiente para conseguir la fianza, porque además de comisiones las empresas especializ­adas piden el 120% del valor de la multa. Y conforme avanza inexorable la cuenta atrás hacia el lunes y sigue sin conseguir pagar, entran en su horizonte oscuras nubes y opciones que prefiere no explorar. Seis veces en su historial recurrió a declaracio­nes de bancarrota­s de sus empresas para salir de aventuras fallidas en casinos en Atlantic City. Y ha presumido muchas veces de haberlo hecho aprovechán­dose del sistema, pero piensa que el golpe de imagen que supondría ahora no sería bueno para sus aspiracion­es de volver al Despacho Oval de la Casa Blanca.

Facturas legales

Las conexiones entre los problemas legales de Trump y su campaña se han confirmado como la maraña que se anticipó. El Comité de Acción Política que le apoya, Save America PAC, se gastó el año pasado 46 millones de euros en costes de abogados del expresiden­te y candidato, y en los dos primeros meses de este año ya han gastado en ese concepto otros 7,8 millones. Y cuando un donante da fondos a la campaña de Trump, el 10% va a ese PAC.

También las donaciones que se hagan al nuevo comité establecid­o entre el candidato y el Comité Nacional Republican­o van a tener como primeros beneficiar­ios a la campaña de Trump y Save America. El partido, cuyo liderazgo se ha renovado recienteme­nte para colocar en las tres principale­s posiciones de poder a aliados del expresiden­te (incluyendo su nuera) había asegurado que no iba a costear sus juicios.

Pero la realidad es que de alguna manera lo va a hacer. En un acto de recaudació­n de fondos organizado para abril, por ejemplo, los primeros 6.075 euros de una donación irán a las cuentas de campaña de Trump, los siguientes 4.600 a Save America y solo después recibirán los fondos (aunque en cantidades mucho más altas) el propio Comité Nacional Republican­o y los partidos republican­os de los estados.

 ?? Sam Wolfe / Reuters ?? Donald Trump señala al público durante uno de los mítines de su campaña electoral para las presidenci­ales, el mes pasado.
Sam Wolfe / Reuters Donald Trump señala al público durante uno de los mítines de su campaña electoral para las presidenci­ales, el mes pasado.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain