El PSOE niega que el referéndum esté en la mesa de negociación con ERC
▶ Los socialistas aseguran que no están hablando de «rupturas» ni «divisiones» con los republicanos, después de que Rovira asegurara que ambos partidos han abordado la consulta
Negociar, sí, pero en ningún caso un referéndum de autodeterminación. El PSOE negó que en sus conversaciones con ERC esté «encima de la mesa» una consulta de independencia, como aseguró la secretaria general de los republicanos, Marta Rovira, en una entrevista con EL PERIÓDICO. La encargada de desmentir las declaraciones de Rovira fue la portavoz de Ferraz, Esther Peña: «Seré rotunda, el PSOE no está en ninguna negociación que hable de rupturas, referéndums y divisiones», aseguró en TVE, preguntada por la mencionada entrevista.
Los socialistas siempre han negado que vayan a abrir la carpeta de la autodeterminación con los independentistas, sin bien consideran que se trata de una reivindicación legítima por parte de ERC y Junts. De ahí que no se cierren a que puedan acudir a las respectivas mesas de negociación pactadas en la investidura con esta propuesta de máximos, aun con el objetivo por su parte de ahondar en una hoja de ruta basada en la «normalización» y la agenda de la «convivencia». Esto es, todo lo contrario al objetivo del referéndum, que según los socialistas van justo en la dirección contraria. «No optamos ni ahora ni en un futuro por opciones que dividan a la sociedad», concluyó Peña, en línea con lo que viene defendiendo su partido y el discurso del candidato del PSC a presidir la Generalitat, Salvador Illa.
Los socialistas confían precisamente en que las elecciones catalanas sirvan para «pasar página» al ‘procés’ con un Govern liderado por Illa. Un «cambio de ciclo político en Catalunya» que ponga en valor su denominada «agenda del reencuentro» y justifique sus pactos de investidura con la ley de amnistía como clave de bóveda de esta legislatura.
En Ferraz enmarcan las declaraciones de los republicanos en el contexto preelectoral, con los comicios catalanes previstos el 12 de mayo y una pugna dentro del bloque independentista por hacerse con las banderas y reivindicar sus respectivas estrategias negociadoras con el PSOE. «Hay posiciones de máximos, somos conscientes de que entre ERC y Junts hay una batalla en su lado para ver quién es más independentista y más maximalista en sus posiciones», argumentaba Peña.
La portavoz del PSOE también trató de hacer pedagogía para aclarar que no pueden hacer renunciar a otras formaciones a sus máximas políticas, aunque no las compartan. De hecho, en la última reunión de las delegaciones de PSOE y Junts en Suiza, se pactó activar los grupos de trabajo para negociar el «reconocimiento nacional» de Catalunya y la financiación. Eso sí, con posiciones de partida que ya se pusieron negro sobre blanco en el pacto de investidura. En lo referente al ámbito «del reconocimiento nacional», Junts propondrá «la celebración de un referéndum de autodeterminación sobre el futuro político de Catalunya amparado en el artículo 92 de la Constitución». El PSOE, por su parte, defenderá el desarrollo del Estatut. El despliegue del Estatut es precisamente uno de los pilares de la hoja de ruta del candidato del PSC, Salvador Illa, en las elecciones catalanas.
El contexto preelectoral no ayuda a buscar soluciones intermedidas, por lo que el PSOE ha pactado con los independentistas congelar sus relaciones con los partidos independentistas. Ni reuniones en Ginebra con Junts ni mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat hasta pasar las elecciones del próximo 12 de mayo. La suspensión de los diferentes espacios de negociación comprometidos con Junts y ERC va en la misma línea de la renuncia a presentar Presupuestos. Por un lado, obedece a la tendencia de todos los partidos a abrazar posiciones de máximos en el contexto electoral. Por otro, mantiene el juego de equilibrios al que se ve obligado el Gobierno ante la espiral competitiva entre posconvergentes y republicanos para rentabilizar sus negociaciones.
Recurso ante el TC
Estas conversaciones podrán mantenerse en segundos niveles, pero sin avances ni publicidad. Todo viene condicionado por el 12M. Los equipos negociadores de ERC y el PSOE se han reunido en tres ocasiones desde que la legislatura echó a andar también en presencia, explican los republicanos, de un «equipo de mediación internacional». Pero a diferencia de lo que ocurre con el verificador de las conversaciones con Junts, ninguno de los dos partidos piensa en dar a conocer la identidad de estas personas. Aún menos ahora, con unas elecciones a la vuelta de la esquina.
Por otro lado, el Consejo de Ministros aprobará hoy la presentación de un recurso ante el Tribunal Constitucional contra la decisión de la Mesa del Parlament de admitir a trámite una Iniciativa Legislativa Popular que pide la declaración de la independencia de Catalunya, sumándose así a la iniciativa del PSC.
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