El gasto por turista y día en BCN supera los 90 € por primera vez
La cifra no incluye el desembolso en transporte y alojamiento, que también creció en 2023 pese al descenso del volumen de visitantes respecto a 2019.
Se sabía que 2023 fue el año de la recuperación de la plena normalidad en la actividad turística de Barcelona, con una cifra de visitantes (12,2 millones de viajeros alojados en negocios turísticos y otros 3,6 en casa de allegados) aún por debajo de la prepandemia, pero un mayor gasto del turista. Sin embargo, hasta ahora no ha trascendido dónde y cómo dejaron sus divisas los visitantes. Un nuevo informe pormenorizado de la actividad publicado por el Observatorio del Turismo en Barcelona revela que por primera vez desde que se tiene registro, el gasto por persona y día superó los 90 euros, mientras que también subió en los apartados de transporte y alojamiento.
El sector está cómodo con el balance, en tanto que el volumen de turistas no creció, pero sí resultaron más rentables para la ciudad. Esa idea encaja con los objetivos de captar a un visitante de mayor calidad que promueven tanto Turismo de Barcelona como el ayuntamiento. En 2023 el gasto general creció un 15%, como ya anunció el consistorio. Pero en concreto el dispendio diario de cada viajero aumentó un 8,7% respecto al año previo hasta llegar a 91,7 euros. Por encima incluso de 2019 (año de récords, en que fue de 82,3 euros).
El detalle de las cifras evidencia también la importancia del turismo profesional (ferias, congresos, reuniones...), ya que los llegados a la ciudad por ese motivo se dejaron de media 109,9 euros diarios, frente a los 87,9 del visitante vacacional, o los 85,2 de quienes vienen por motivos personales y otros. Del mismo modo, el gasto ascendió a 95,6 euros en el caso del turista internacional, frente a 72,2 euros del procedente del resto de España.
Comer y beber es la prioridad
¿A qué destinan su dinero? En primer lugar, a comer y beber (un 46,5% del total, aunque cabe destacar que este dato se eleva al 62,1% en el caso de turistas de la región de Barcelona, que excluye la capital catalana), le sigue el entretenimiento, ocio y cultura, con un 19,5% de su presupuesto diario, así como las compras de ropa, calzado, recuerdos y efectos personales (16,4%), el transporte inter
El balance pone de relieve la potencia del viajero de negocios y del internacional
no (13,6%). Crece también el apartado de otros (4%, en gastos como compras de otro tipo, tratamientos médicos y demás).
Turismo de Barcelona destaca el incremento generalizado en todas las partidas. Siguiendo también con el alojamiento, en consonancia con el aumento de precios que ya han destacado los hoteleros. Este sector ingresó más, aunque matizan que sus beneficios no fueron superiores, por el incremento de la inflación y el endeudamiento que arrastran desde el covid-19. En cualquier caso, los visitantes encajaron esa coyuntura, pagando de media 84,2 euros por noche, frente a los 68,5 del año anterior. Cabe destacar que el profesional desembolsó casi el doble (más de 150 euros) que el de ocio.
También el viaje (transporte) se incrementó, con una media de 382 euros, solo superada en 2017. Y de nuevo, este saldo asciende a 500 euros en el caso del visitante por motivos profesionales, frente a 374,4 del vacacional.
En cambio, quienes llegaron con un paquete turístico completo pagaron de media 1.249, 5 euros, con un notable incremento sobre los precios de 2022 (982 euros). ■