Aragonès ofrece un debate a tres fuera de Catalunya que Illa rechaza
▶ El líder socialista evitará cualquier gesto que valide la estrategia del expresident y busca reflejar la fractura de los bloques
Ni debates que no se organicen en Catalunya ni que sean en formato cara a cara o con solo tres candidatos. El líder del PSC, Salvador Illa, dio ayer un sonoro portazo al reto lanzado para la campaña por el president Pere Aragonès para confrontar dialécticamente con él y con el cabeza de lista de Junts, Carles Puigdemont, aunque tenga que ser fuera del Estado. A los socialistas les bastó con un comunicado para dejar claro que no están dispuestos a participar en debates en los que no participen la mayoría de los número de uno en las elecciones del 12 de mayo.
Más allá de la defensa de la amnistía para «normalizar» la situación en Catalunya, Illa no hará ningún gesto que suponga validar la estrategia de Puigdemont en los últimos años para librarse de los procesos judiciales derivados del 1-O. Sería tanto como entrar en su terreno y en sus coordenadas de campaña, así como facilitar al PP el argumento de que es gracias a los socialistas que el expresident podrá regresar.
Además, si una cosa interesa al PSC de cara a las elecciones del 12 de mayo es proyectar que los bloques se han roto y que él ocupa una centralidad. Illa quiere en los debates rivalizar a derecha e izquierda, con independentistas y no independentistas, por lo que huirá de todo formato que no le permita promover ese perfil. Menos aún si eso supone quedar encasillado en un marco en el que ERC y Junts aprovechen para presumir de haber arrancado la amnistía a Pedro Sánchez y reivindicar el referéndum o una financiación a la vasca que los socialistas rechazan y deje en un segundo plano el eje de la gestión en el que el PSC quiere situar el eje de su campaña.
Las tres condiciones
Tres son las condiciones que han fijado desde la sede de la calle Pallars para participar de los debates: que estén organizados en Catalunya por medios de comunicación, instituciones, organizaciones o agentes de la sociedad civil, que cuenten con la presencia de la mayoría de candidatos de los partidos que tienen en estos momentos representación en el Parlament y en los que esté garantizada la difusión, ya sea por canales televisivos, radiofónicos o digitales.
Aragonès, en declaraciones a RAC-1, se mostró dispuesto a desplazarse al extranjero para hacer un debate a tres porque Puigdemont no puede, por ahora, regresar a España: «Donde sea y cuando sea», dijo el president.
El candidato de ERC se declara dispuesto a debatir con los de Junts y el PSC «donde sea y cuando sea»
Así, para Aragonès no sería un problema hacerlo en Bélgica, donde el expresident reside desde 2017, o en el sur de Francia, donde Puigdemont está celebrando sus actos electorales. Aragonès asegura que, para él, la ubicación del debate no será un problema: «Para hablar de propuestas de futuro estoy dispuesto a hacerlo donde sea. Si hace falta fuera de Catalunya. El lunes mismo iré [a Madrid] al Senado a defender la amnistía».
Con esta propuesta, Aragonès busca que la campaña no sea percibida para la opinión pública como una contienda a dos entre Illa y Puigdemont. El riesgo de los republicanos sería que Illa se perciba como el principal candidato anti ‘procés’ y Puigdemont como el candidato más pro ‘procés’, y esto desdibuje la candidatura republicana. Por ahora las encuestas detectan una batalla a tres entre el PSC, ERC y Junts –en la que los socialistas parten con ventaja–, y ERC quiere que así se mantenga hasta el final.
El precedente
Aragonès defiende que es «bueno que haya debates porque la cuestión es poner propuestas encima de la mesa». «Yo estoy dispuesto a hacer todos los debates que haga falta con todo el mundo porque tengo ganas de explicar mis propuestas», dijo.
Aunque la propuesta de un debate a tres sea singular, no es inédita. En la campaña de las elecciones al Parlament de 2012, hubo una contienda así protagonizada por el entonces president y candidato de CiU, Artur Mas; el candidato del PSC, Pere Navarro, y la candidata del PP, Alícia Sánchez Camacho, que se celebró en 8tv.
En aquella ocasión, a las tres partes les interesó un formato de estas características. A Mas, para visualizarse como el principal candidato soberanista; a Camacho, como la candidata más contraria al ‘procés’, y a Navarro, como el candidato de la tercera vía, el federalismo que entonces propugnaba el PSC. Aquella vez fue Navarro quien propuso celebrar el formato a tres.
■