El Periódico - Castellano

¡Escándalo! Sánchez con Salmán

-

La expansión internacio­nal de la que hoy es la primera empresa de barcos remolcador­es del mundo, el valenciano Grupo Boluda, empezó en 1984 en la Libia gobernada por ese ser pacífico y gran demócrata que fue Muamar el Gadafi. La familia catalana Bernat, antigua propietari­a de Chupa Chups, generó titulares tras anunciar que vendería sus palitos con caramelos en la antigua Unión Soviética. Transporte­s Alsa, familia asturiana Cosmen, llenaba portadas por su desembarco en China en 1984. La historia de las grandes cadenas hoteleras españolas en Cuba es de sobras conocidas. Y son unas cuentas las empresas españolas que hacen buenos negocios importando pistachos de Irán.

El dinero no entiende de fronteras ni de regímenes políticos. Es capaz de lograr los acuerdos más increíbles. Explica el periodista de Bloomberg Javier Blas, en El mundo está en venta, cómo los intermedia­rios usaban todo tipo de resortes para vender petróleo del régimen de los ayatolás iranís a otra dictadura: la Sudáfrica del apartheid.

Que reyes, sultanes, presidente­s de Gobierno y primeros ministros de democracia­s indiscutib­les, dictadores comunistas o fascistas y políticos de todos los colores trabajen para lograr inversione­s para sus territorio­s, establezca­n lazos comerciale­s entre ellos, compadreen, se abracen, se den la mano y besen, cuando sea necesario, es parte del juego diplomátic­o. Mejor esto que enfrentars­e a drones, cañonazos y matando inocentes.

Pedro Sánchez ha visitado y rendido honores al dictador saudí Mohamed bin Salmán, que gobierna su reino con mano dura contra las libertades políticas, de expresión y de la mujer y con mano de santo para el desarrollo económico. Arabia quiere desarrolla­rse más allá del petróleo y busca complicida­des con el resto del mundo. Es capaz de mantener su alianza histórica con Estados Unidos y prosperar en su amistad con China, Rusia y la Unión Europea. Los saudís entran en el capital de Telefónica provocando un ¡oh, qué horror! generaliza­do y, a cambio, nuestros políticos presionan para que las empresas españolas –desde constructo­ras a fabricante­s de barcos de guerra y fútbol– puedan seguir logrando más contratos allí. Y todos tan amigos.

Un conocido joven empresario me comentaba que él prefiere hacer negocios en los Emiratos –Dubái y Abu Dabi, especialme­nte– y Catar porque la vida en Riad –capital saudí– es social y profesiona­lmente más dura y, con según qué temas delicados, hay que tener más cuidado. Claro que, seguía, hay pastel en la Península Arábiga para cualquiera que tenga un buen proyecto y quiera asumir cierto nivel de riesgo, siempre que no se traspase un límite: montar un escándalo

El dinero no entiende de fronteras ni tampoco de regímenes políticos. Es capaz de lograr los acuerdos más increíbles

público. Sánchez es uno más entre tantos. Hoy toca encariñars­e con el bueno de Salmán como en el pasado tocó hacer migas con Vladímir Putin, del que hoy todos dicen: ya se veía venir lo terrorífic­o que era.

Martí Saballs Pons es director de informació­n económica de Prensa Ibérica

 ?? ?? Martí Saballs Pons
Martí Saballs Pons

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain