«El fútbol femenino catalán va más allá de Alexia y de Aitana»
El actual Barça bicampeón de Europa empezó a gatear con él. Ahora coge las riendas de la selección catalana en el partido de hoy ante Paraguay (12.00h, Estadi Municipal de Palamós, TV3).
— ¿Tenía ganas de entrenar?
— No. Pero esa no es la situación. Yo dejo de entrenar en 2017, pero continúo trabajando para el Barça femenino. Con Markel busco jóvenes de entre 12 y 20 años con proyección para el Barça. Entre ellas, Vicky López, por ejemplo. En el club éramos un grupo de cuatro scouters que trabajábamos buscando lo que nos pedía Markel. Cuando Natalia Arroyo deja la selección, la Federació Catalana busca un seleccionador que sea un referente dentro del femenino. A las jugadoras les hace gracia que yo lo sea y me parece perfecto. El trabajo en sí ya es el que estoy haciendo en el Barça y es un partido al año.
— Hace años que es seleccionador, pero aún no ha debutado.
— Sí, no se ha hecho hasta ahora el partido. Mi trabajo se basa en ir a actos institucionales de la FCF y representar al femenino. Tampoco me acarrea mucho más. Al Barça también le gusta que yo esté.
— Un partido al año.
— No lo puedes coger como un equipo porque no puedes entrenar. Por lo tanto, no puedo pretender que jueguen a lo que yo quiera, sino que me tendré que adaptar yo más a ellas. Jugaremos para ganar, lo haremos bien, pero tendremos delante una selección que está apostando por defender unos campeonatos. No se puede comparar lo que está haciendo Paraguay con lo que haremos nosotras. Ellas han estado toda la semana entrenando, nosotras lo haremos el sábado por la tarde y será una aclimatación.
— El partido de este domingo será más bien una fiesta.
— Es una fiesta para la afición del fútbol femenino. Y nos permite comprobar una vez más que el fútbol femenino no solo es el Barça. Tiene un abanico muy grande de jugadoras. No se acaba en Alexia o Aitana. Hay muchas jugadoras que están trabajando mucho para tener visibilidad. Es cierto que nos faltan muchas jugadoras, pero las que vienen representan a Catalunya. Las de primer nivel no pueden venir por compromisos a los que no pueden decir que no. Las fechas son las que son. Si fueran otras, la selección catalana tendría otra cara. Pero yo estoy muy orgulloso de las que vienen. Traemos jugadoras de todas las zonas de Catalunya. No podemos centrarnos solo en un club o una determinada manera de entender el fútbol. Tenemos que intentar representar todos los lugares de Catalunya, con la dificultad que todo está centrado en las que juegan.
— ¿Le apena que las jugadoras catalanas que están con la selección española no puedan estar?
— No es pena, porque las que vienen también se lo merecen. Hay muchas jugadoras que les gustaría estar y no estarán. Sea porque están con la selección española o porque no las he llamado.
— No está acostumbrado a hacer este tipo de listas. En el club no funciona así.
— He contado unas 60 jugadoras en Primera. Tengo que convocar a unas 20. Dejo a muchas fuera, pero no hay sitio para todas. ¡Ya me gustaría a mí! En el club sí que escojo yo a quien quiero en el equipo, aquí, no. Que nos tenemos que aguantar mutuamente un año.
— ¿Cómo han sido las conversaciones con ellas para hacer la lista?
— Con mucha ilusión. Es cierto que hay futbolistas que se están jugando el futuro de su club y el suyo estos meses. Y afecta. Pero me ilusiona que vengan con tantas ganas.
— ¿En qué momento se halla el fútbol femenino en Catalunya?
— Tiene una salud buenísima. Se están haciendo muy bien las cosas, lo que también conlleva que vengan muchas jugadoras de fuera. Hay sitio para todas. La pena es que no haya más clubs catalanes en Primera. Un par más nos irían bien.
— Hay clubs como el Girona, sin embargo, que tienen una apuesta de crecimiento para el femenino.
— No solo cuesta dinero, sino también instalaciones, estructuras y gente dedicada. Esta es una defensa que siempre hemos hecho desde la Federació Catalana, pero cuesta mucho que los horarios de entrenamiento y las competiciones se hagan con cara y ojos. Hay que seguir trabajando. Cada vez veo más jugadoras catalanas, tenemos más referentes. Los tres últimos Balones de Oro son de futbolistas catalanas y eso nos da un impulso increíble.
— Probablemente aún no le damos la dimensión que merece. ¿Cuál es el ADN común?
— Creo que es la pasión con la que juegan. Ser profesional no significa ganar mucho dinero. Ser profesional significa dar el 100% por lo que haces y sabiendo que habrá un mañana que si no te cuidas y descansas te perjudicará.
— Las ha visto crecer hasta convertirse en los emblemas que son ahora. ¿Cómo ha evolucionado fútbol femenino desde el primer día que dirigió al Barça hasta su debut como seleccionador?
— No tiene nada que ver en ningún sentido. Ha crecido todo, pero la pasión y las ganas que se ponían hace unos años son las mismas que ahora. Si no, no existiría el fútbol.
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