Israel mata a tres hijos del líder político de Hamás en un bombardeo en Gaza
▶ En el ataque también fallecieron varios de los nietos de Haniye, que vive en Catar
Durante los seis meses de guerra contra Gaza son pocos los palestinos cuya muerte haya ido acompañada de la publicación de su nombre propio en la prensa internacional. La mayoría simplemente han pasado a ser otro número más de los 33.482 gazatís fallecidos en ataques israelís. Pero eso no será igual para Hazem, Amir y Mohamed. Estos tres hijos del líder político de Hamás, Ismail Haniye, junto a varios de sus nietos, fallecieron ayer víctimas de un bombardeo aéreo israelí mientras visitaban a sus familiares en el campo de refugiados de Shati, en el norte de la Franja, para la fiesta del fin del Ramadán.
Desde Catar, donde vive hace años, Haniye dijo a Al Jazeera que estas pérdidas no cambiarán las demandas de Hamás para un alto el fuego. «La sangre de mis hijos no es más valiosa que la sangre de los hijos del pueblo palestino», dijo rápidamente el líder político de Hamás tras conocerse los decesos. «Todos los mártires de Palestina son mis hijos», afirmó este padre de 13 vástagos, que se enteró de la muerte de tres de ellos mientras visitaba a heridos de Gaza en un hospital de Doha.
«Limpieza étnica»
Desde el inicio de la guerra, Haniye ha perdido a 60 miembros de su familia. «No hay duda de que este enemigo criminal está impulsado por el espíritu de venganza y el espíritu de asesinato y derramamiento de sangre, y no observa ninguna norma ni ley», manifestó al confirmar la muerte de sus hijos en un día muy señalado para la población musulmana. «Hemos visto que [Israel lo] viola todo en la tierra de Gaza: hay una guerra de limpieza étnica y genocidio», agregó Haniye.
La oficina de medios de Gaza denunció la «masacre» contra la familia de Haniye. Informó que los hijos y nietos del líder de Hamás fueron asesinados por aviones de combate israelís cuando el «vehículo civil» en el que viajaban fue atacado durante este primer día de Eid al Fitr. Los familiares de Haniye se encontraban en el campo de refugiados de Shati, de donde es oriundo su padre y abuelo. También informaron que al menos 125 cadáveres llegaron a varios hospitales de la Franja solo en las últimas 24 horas. «Responsabilizamos a la Administración estadounidense, a la comunidad internacional y a la ocupación israelí por estas masacres y crímenes que todavía tienen lugar en este genocidio en curso», añadió.
Rápidamente Haniye aclaró que el ataque a su familia, prueba del «fracaso» de Israel, no cambiará la posición del grupo en las conversaciones de alto el fuego, en las que exigen una tregua permanente y el regreso de los palestinos desplazados a sus hogares. «Si piensan que atacar a mis hijos en el momento álgido de estas conversaciones, antes de que se presente la respuesta del movimiento [como se refieren a Hamás], hará que Hamás cambie sus posiciones, se engañan», dijo a Al Jazeera TV.
Israel manda de esta forma un duro mensaje a Haniye al atacar por primera vez a sus hijos de forma directa. Los familiares asesinados hasta ahora eran más lejanos, como primos y sobrinos. ■