BCN presenta su candidatura para un centro mundial sobre economía azul
La Unesco pide en la apertura de la Conferencia de los Océanos una mayor inversión internacional en la investigación de los mares para lograr soluciones basadas en la ciencia.
Barcelona ha presentado candidatura a la Unesco para albergar el primer centro mundial dedicado al desarrollo y a la divulgación de la economía azul. La capital catalana quiere convertirse en la primera ciudad en liderar la transformación hacia la sostenibilidad de la actividad económica desarrollada en el mar, uno de los diez retos fijados por Naciones Unidas en defensa del ecosistema marino.
El centro estará impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona, que cuenta con el Port de Barcelona como socio clave y el apoyo científico del Institut de Ciències del Mar del CSIC y la red BlueNet Cat, que reúne a más de 700 científicos que desarrollan investigaciones relacionadas con la economía azul. Esta red trabaja para la transferencia del conocimiento y la investigación hacia la empresa y la actividad económica.
Colaboración internacional
El centro se postula como un espacio para la colaboración internacional y la divulgación de nuevas soluciones. «Estamos trabajando con otras ciudades mediterráneas para promover ecosistemas marinos urbanos y de protección de la biodiversidad, porque las ciudades son parte esencial de la solución», explicó ayer el alcalde, Jaume Collboni, durante el acto de apertura de la Conferencia del Decenio de los Océanos, que tiene lugar hasta mañana viernes en la ciudad, con la presencia de 1.500 expertos en la investigación y la protección del océano.
Barcelona es la única ciudad que se ha postulado de forma oficial, con un compromiso de financiación para cinco años, por lo que existe la confianza de que pueda ser la elegida.
«El 5% de la ocupación en Catalunya está relacionada con la economía azul», destacó el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, que puso en valor la tarea de investigación y desarrollo (I+D) que lleva a cabo BlueNet Cat y el papel del Instituto Oceanográfico de Catalunya, que muestra el camino de un nuevo modelo de gobernanza que reúne a investigadores con todos los actores que operan en el mar.
Patentes y licencias
El centro supone una oportunidad para «dar a conocer la enorme actividad científica que se desarrolla para que derive en patentes y licencias», destacó el director de la red de investigación BlueNet Cat, Pablo Bou.
Precisamente, la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, reclamó en la apertura de la conferencia una mayor inversión internacional para la investigación, ante la urgencia de desarrollar un verdadero conocimiento acerca del océano que fomente soluciones basadas en los datos y la ciencia.
Pese a la urgencia de la crisis climática, la falta de datos imposibilita tomar decisiones sobre políticas correctamente dirigidas, incidió el enviado especial para los Océanos de Naciones Unidas, Peter Thomson. El representante de Naciones Unidas alertó que si la temperatura del océano aumenta tres grados en los próximos años provocará que sea inhabitable y traerá «multitud de consecuencias negativas para todos».
Momento crucial
En un «momento crucial» para intentar frenar los efectos del cambio climático, responder a las amenazas del calentamiento y aumento del nivel del mar que afectará a las zonas costeras y a la biodiversidad, el impulso de la economía azul basada en el conocimiento científico es una oportunidad, destacó la Ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant.
Los participantes en la Conferencia del Decenio de los Océanos empezaron la discusión en torno a los 10 retos que afronta el mar para presentar, mañana en la clausura, en la declaración de Barcelona, una hoja de ruta de aquí al año 2030 para asegurar su salud y la del planeta, con acciones basadas en el conocimiento científico. ■
«Promovemos con otras ciudades ecosistemas marinos urbanos», explicó Collboni