Una Regata Cultural para promover la Copa América
Más de 60 entidades ofrecen citas artísticas, deportivas, gastronómicas, de ciencia y ocio para favorecer la difusión de la competición tecnológica de vela en Barcelona.
Barcelona se vuelca en la Copa América de vela. Hace meses que la capital catalana demuestra su entrega institucional a la histórica competición, pero ayer quisieron evidenciar la implicación con una imagen de los representantes de las 60 entidades culturales, artísticas, deportivas, gastronómicas, de ciencia y ocio que han organizado más de 200 actividades hasta octubre. El lugar elegido fue la Fundació Miró.
El Ayuntamiento de Barcelona invitó a museos, bibliotecas, salas de conciertos y exposiciones, organizaciones culturales y artistas a zambullirse en la cita y apuntarse a la Regata Cultural. También al mundo de la restauración, la gastronomía, el comercio y la promoción de la ciudad. Y al ámbito del deporte de base, con los clubs náuticos barceloneses, para construir lo que debe ser el legado de la competición, ya que una de las obsesiones de los organizadores y las administraciones es que el evento deje huella en Barcelona, con afición dentro y fuera del agua.
«Barcelona quiere volver a deslumbrar al mundo desde el mar», reivindicó el alcalde Jaume Collboni en un auditorio de la Fundació Joan Miró que superó el aforo, con mucha gente de pie. «Lo haremos junto a la ciudad, no solo las administraciones y la organización, queremos hacerlo con el tejido asociativo y que sea 100% barcelonesa», explicó el alcalde.
Por todo lo alto
Collboni recordó que la capital catalana es la única ciudad del mundo en la que se han celebrado unos juegos olímpicos, un mundial de fútbol y, ahora, la Copa América. Por eso también se propuso a America’s Cup Event (ACE) que se hiciera una ceremonia de inauguración por todo lo alto. El día elegido es el jueves 10 de octubre.
«Estamos muy orgullosos e ilusionados: queremos mostrar cómo el conjunto de la ciudad se reivindica como una Barcelona igualitaria, comprometida con la sostenibilidad y la tecnología», prosiguió el alcalde para a continuación dar paso a las diferentes entidades que han fijado actividades durante varios meses.
Concierto en la playa
Entre las 200 actividades habrá algunas que se prevén multitudinarias, como la que protagonizará el viernes 12 de julio el aclamado director de orquesta venezolano
Gustavo Dudamel. El artista, a través de un vídeo, prometió «una tarde única». Un concierto gratuito en la playa en el que dirigirá el Coro y la Orquesta Sinfónica del Liceu, y estará acompañado por dos solistas de renombre internacional, la violinista María Dueñas y el violonchelista Pablo Fernández, y tendrá la colaboración del Coro Infantil del Orfeó Català. «No puedo esperar más a que llegue el momento», aseguró. El director de L’Auditori de Barcelona, Robert Brufau, recordó que en el concierto que hicieron el año pasado se congregaron 20.000 personas. «Este año no sé cuántas llegaremos a ser», señaló. En esta ocasión quieren hacer «un himno a los grandes acontecimientos deportivos».
A las actividades musicales o citas en museos y bibliotecas se suman también otros acontecimientos culturales, como la celebración de conciertos de habaneras o la exhibición de los tradicionales patines de vela, que en Vilanova i la Geltrú, en la regata preliminar, sumaron 200 participantes, pero que esta vez quieren llegar a 300, explicó Miquel Àngel Alonso, del club barcelonés.
Desde la organización de ACE, con la vicepresidenta Aurora Catà en la sala y en la foto de familia, están encantados con la implicación ciudadana al evento deportivo y tecnológico. La cantidad de voluntarios inscritos, más de los que necesitaban para los 68 días de competición, les ha sobrepasado, lo que demuestra las ganas barcelonesas de Copa América.
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«Barcelona quiere deslumbrar de nuevo al mundo desde el mar», dijo Collboni