Harry Kane, el astro sin títulos
El delantero inglés del Bayern presenta un historial tan brillante en su faceta goleadora como estéril en cuanto a los éxitos colectivos.
Después de que el Leverkusen de Xabi Alonso confirmara matemáticamente la conquista de su primera Bundesliga, comenzó a circular un meme con Kingsley Coman y Harry Kane, del Bayern de Múnich, de protagonistas. Porque desde que el extremo francés debutó con el PSG a los 16 años, había ganado 12 títulos ligueros consecutivos, dos con su primer club, otro par con la Juventus y ocho con el Bayern. Nunca había terminado una temporada profesional sin coronarse campeón liguero.
Venía a decir el meme que ha tenido que llegar Kane al Bayern, el pasado verano, para que Coman no gane una liga. Porque el delantero inglés no solo no la ha ganado. Es que nunca ha ganado nada. Ni una Copa, ni una Supercopa, ni un título europeo menor, por supuesto tampoco un trofeo con la selección de Inglaterra... Las dos veces que más cerca estuvo de lograrlo fueron la final de Champions de 2019, que el Tottenham perdió contra el Liverpool en Madrid, y la de la Eurocopa de 2021, en la que Italia batió a Inglaterra en su casa, en Wembley. Kane también perdió la final de Copa de la Liga inglesa en 2021, ante el City, y quedó segundo en la Premier 2016-17, a siete puntos del Chelsea.
Hablamos de uno de los mejores goleadores de este siglo, de uno de los mejores futbolistas de la última década, del capitán de Inglaterra, de un fichaje de 100 millones... Una leyenda, en definitiva.
Kane es el segundo goleador histórico (213 tantos) de la Premier League (fundada en 1992), solo por detrás del mítico Alan Shearer (260) y por delante de cracks como Wayne Rooney, Sergio Agüero, Thierry Henry o Frank Lampard. En tres temporadas acabó como Bota de Oro del campeonato. En toda la historia de la primera división inglesa, disputada por primera vez en 1888, 136 años de fútbol, ocupa el puesto 19º en el ranking anotador y si hubiera seguido en el
Tottenham un año más es fácil que se hubiera acercado al top 10. El ariete del Bayern es también el máximo goleador de Inglaterra (62), tras superar a Rooney en el Mundial de Catar y el décimo con más partidos jugados, con muchas opciones, todavía con 30 años, de cerrar su carrera como el hombre récord en ese registro.
Fue el verano pasado cuando finalmente cerró su etapa en el equipo de su vida, en el que había militado de manera ininterrumpida (sin contar cesiones) desde los 11 años hasta los 29. Sonó como posible recambio de Karim Benzema en el Real Madrid, de hecho, pero acabó fichando por el Bayern, donde sigue a lo suyo: 42 goles en otros tantos partidos.
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