Reino Unido baraja otro confinamiento general
El Gobierno británico estudia la opción por el aumento de contagios
La segunda ola de coronavirus alcanza de pleno al Reino Unido. La próxima semana, Boris Johnson podría imponer restricciones a nivel nacional. El Gobierno estudia medidas para frenar la epidemia, ante 6.000 casos nuevos diarios y un total de contagiados e ingresos hospitalarios que se dobla cada semana.
Millones de británicos están ya sometidos a severas restricciones de contactos sociales, frecuentación de locales de ocio y uso de transporte público en zonas cada vez más amplias del país especialmente afectadas, como el norte de Inglaterra. En Londres, donde de momento no hay especiales limitaciones, la infección se expande rápidamente. El primer ministro se resiste a un segundo confinamiento en toda Inglaterra, como el que se implantó el pasado mes de marzo. Sin embargo, el ministro de Sanidad, Matt Hancock, no ha descartado esta posibilidad.
«Haremos lo que sea preciso para garantizar la seguridad de los ciudadanos. Queremos evitar un confinamiento nacional, pero estamos dispuestos a hacerlo, si es necesario», declaró ayer Hancock. Las nuevas normas implicarían el cierre de establecimientos de hostelería durante un periodo de dos semanas. Las escuelas y los centros de trabajo seguirían sin embargo abiertos.
Según ha trascendido, los máximos responsables del equipo científico que asesora al Gobierno, Chris Witty y Patrick Vallance, participaron en una reunión el miércoles en Downing Street, para advertir que puede haber un número significativo de muertes a mediados del próximo mes si no se toman medidas más severas ante el imparable rumbo de la epidemia. Más de 10 millones de británicos se hallan sometidos a confinamientos locales.
H