Nadal: «Para aspirar a lo que quiero, mi espalda tiene que mejorar»
El balear alcanzó la segunda ronda tras ganar a Djere. También avanza el joven Carlos Alcaraz
Rafa Nadal, número dos del mundo, superó ayer su estreno en el Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada y que se disputa en Melbourne, al vencer con solvencia al serbio Laslo Djere en tres sets (6-3, 6-4 y 6-1) en un partido en el que, sin embargo, acusó molestias en la espalda que le obligaron incluso a cambiar el saque.
El rotundo resultado ante el tenista balcánico, que le dio el pase a una segunda ronda donde se enfrentará mañana al estadounidense Michael Mmoh, dejó en un segundo plano los dolores que el balear sufrió durante el encuentro, que ya le impidieron participar en la pasada Copa ATP.
«Cuánto más alargue mi andadura en el torneo, más opciones tendré de solucionar el problema en la espalda. He tenido que sacar con un movimiento diferente y hoy me ha dado para ganar», comentó, pero señaló que para llegar hasta donde él quiere, es decir, al triunfo final, su espalda tiene que mejorar. «Cuando caigo tras el saque y tengo que ir a por la siguiente bola viene el problema, cuando uno saca pensando en qué hacer para que no vaya peor la situación. Al resto no tengo problema», señaló.
En cuanto al resto de la armada, Garbiñe Muguruza, Carlos Alcaraz, Pablo Andújar, Feliciano López y Roberto Carballés consiguieron avanzar a segunda ronda, mientras que Paula Badosa, Aliona Bolsova, Roberto Bautista y Mario Vilella se despidieron.
Con solo 17 años y 19 días, Carlos Alcaraz logró su primera victoria en un cuadro principal de Grand Slam después de apabullar al holandés Botic Van de Zandschulp en solo tres sets (6-1, 6-4 y 6-4). Se convirtió en el jugador más joven en ganar un partido de un grande desde 2014 y ya hay quien lo compara con Nadal.
HLos investigadores del accidente que acabó con la vida del jugador de baloncesto Kobe Bryant y otras ocho personas aseguraron hoy que el piloto del helicóptero se desorientó por culpa de la niebla y sostuvieron que no siguió las normas al volar entre nubes espesas, informaron hoy medios estadounidenses.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) celebró ayer una audiencia para anunciar sus hallazgos sobre el accidente ocurrido el 26 de enero de 2020 en Calabasas (California, EE.UU.) en el que falleció una de las leyendas más grandes de la historia de la NBA, con 41 años, y también su hija Gigi, de 13.
La NTSB detalló que el piloto Ara Zobayan, que también murió en el accidente, se desorientó al volar a través de la niebla que había ese día en una zona montañosa al oeste de Los Ángeles (EE.UU.). Las autoridades aseguraron que Zobayan fue así contra las normas de su formación, ya que al volar entre nubes espesas y con visibilidad limitada un piloto puede llegar a pensar que está yendo hacia arriba cuando en realidad está perdiendo altitud.
Eso fue lo que sucedió en este accidente, según la NTSB, que recordó hoy que el piloto había señalado a control aéreo, poco antes de estrellarse, que estaba ganando altitud para superar las nubes pese a que de hecho estaba bajando.
El helicóptero había despegado por la mañana del condado de Orange, al sureste de Los Ángeles, y se dirigía al condado de Ventura, situado al oeste de la ciudad californiana, cuando finalmente se precipitó hacia las 9.45 horas en una zona montañosa de la ciudad de Calabasas. La viuda del jugador, Vanessa Bryant, acusó en una denuncia a la compañía de helicópteros y al piloto de negligencia en la muerte.
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