«La falta de visibilidad es el reflejo de los estereotipos»
BLANCA FERNÁNDEZ TOMÉ Plasencia, 1984. Veterinaria docente e investigadora de la Unidad de Laparoscopia del Centro de Cirugía de Mínima Invasión Jesús Usón de Cáceres
Tenía 7 años cuando su abuelo, en el campo, le abrió el mundo de la investigación sin saberlo. «Me enseñó cómo era el corazón de un cerdo por dentro y me dijo: `Mira, estos son los músculos que bombean la sangre a todo el cuerpo. Increíble poder ver lo que nos hace vivir. Aunque ahora soy más consciente de ello, creo que siempre he tenido la necesidad vital de querer saber más, de sorprenderme con las curiosidades de lo vivo».
Así empezó a descubrir un camino del que ha hecho su modo de vida (tras estudiar Veterinaria en la UEx, hacer un máster, un doctorado y pasar un año en Bélgica) y en el que no cree que lo haya tenido más difícil por ser mujer, aunque sí considera que «queda mucho por hacer» para que el trabajo de ellas sea mucho más visible, algo que «sigue siendo el reflejo de los estereotipos de masculinidad arraigados en nuestra sociedad a través de la educación». Otro factor en contra es la incertidumbre. «En la ciencia, como en otros ámbitos, no se crea un tejido profesional con proyección a largo plazo».
La inversión en investigación en España es muy baja -«siempre mendigando para que suba al 2% del PIB»- y si se investiga más en Extremadura, dice, es gracias al Centro de Cirugía Mínima Invasión de Cáceres en el que trabaja. «Creo que este es el camino; que los gobiernos se centren más en I+D+i y menos en proyectos cortoplacistas». Ahora, además de realizar estudios de investigación aplicada de biomateriales que se llevan a cabo en el CCMIJU, Blanca también coordina un proyecto de colaboración del centro Jesús Usón y el Hospital Infantil de Cincinnati (EEUU), cuyo objetivo es encontrar un tratamiento prenatal de la hidrocefalia.