Una oportunidad para Santiago
No hay que cambiar el uso, pero la comisión del plan especial tendrá que asegurar que el proyecto no rompe con el entorno
Los promotores del hotel que se planifica en el palacio de Godoy han presentado esta semana su proyecto en el ayuntamiento. Esta actuación aparece como una oportunidad para la plaza de Santiago y las calles aledañas, que es una de las zonas del casco viejo que más población ha perdido en la última década. En la memoria del plan especial, que es la norma que regula las intervenciones urbanísticas en el recinto intramuros y en todo el casco viejo, Santiago figura entre las áreas urbanas donde se ha producido un «aumento drástico de su deterioro», una lista en la que también están la calle Barrio Nuevo y su entorno.
Este hotel, posible gracias a una colaboración pública (la Junta pone el edificio) y privada (que aporta la inversión), tiene que ayudar a cambiar esta situación. Santiago es un área urbana que está desaprovechada, cuenta con espacios abiertos (en los alrededores de la iglesia, en la calle Godoy o en la plaza del Duque) que se pueden convertir en el noreste del casco viejo lo que San Juan es en el suroeste.
El camino previo para que el proyecto encuentre los menores obstáculos posibles se allanó hace dos años, otra cosa es lo que han tardado los promotores en presentar el proyecto en el ayuntamiento. En febrero de 2019, el ayuntamiento, en contra del criterio de su servicio técnico de Urbanismo, decidió que no era necesario modificar ni el plan general de urbanismo ni el plan especial para que el palacio de Godoy se transformase en un hotel. El ayuntamiento se acogió a la interpretación de la Junta, que coincidía con la del servicio jurídico municipal de Urbanismo, de que el uso que tiene asignado el edificio, cultural y docente, puede entenderse como una recomendación y por tanto es compatible con el uso público institucional y dentro del mismo está el hotelero.
Los servicios técnicos de Urbanismo del ayuntamiento argumentaron que los usos asignados a la parcela del palacio se modificaron con el cambio puntual del plan especial que se tramitó hace más de una década, cuando el conservatorio de música se iba a trasladar al palacio de Godoy. Entonces se asignaron a la parcela utilidades culturales y docentes. Además estos servicios recordaron que un cambio de utilidad de dotacional (docente y cultural) a terciaria (hotelero) supone un incremento del aprovechamiento usos considerados compatibles en el plan especial, que permitiría en el palacio todas las categorías del uso institucional, entre las que está el uso hotelero.
Ahora queda que la comisión del plan especial asegure que el proyecto no rompa con el entorno (no más edificios rojos) y que se cumpla la promesa del alcalde de que se agilizará la licencia, pero no para que con el hotel esta zona se convierta en Montmartre, como se llegó a decir de esta iniciativa, sino en un espacio recuperado que no solo lleve a los turistas, sino también a nuevos vecinos.