La canasta al final del túnel
Está completando con entusiasmo su proceso de recuperación tras lesionarse de gravedad el pasado 8 de marzo
Pronto, el 8 de marzo, se cumplirá un año desde que Carla Ollero se rompía la rodilla en un partido del Al-Qázeres de Primera Nacional. Pero ese fatídico momento no supuso fracturar también sus sueños: siendo una de las mayores promesas del baloncesto femenino extremeño, está a punto de reaparecer tras una larga recuperación que complicada más aún por el confinamiento al que fue sometido toda la población unos pocos días después de su percance.
«Estoy en la recta final. Lo que me queda es fortalecer un poco más la musculatura, la extensión de la rodilla», cuenta con una sonrisa en los labios. Es junior de segundo año y confía en poder regresar a las pistas esta misma temporada si las circunstancias lo permiten. «Lo que quiero es que quede bien, no meter prisa. Lo he pasado mal todo este tiempo», añade. Nacida en Cáceres (27-4-2003) y tras haber vivido siempre en Casar de Cáceres, siempre ha destacado en categorías inferiores, primero con el San Antonio Cáceres Basket y luego con el actual Alter Enersun Al-Qázeres.
Una parada en seco le propició la rotura de ligamentos, sin intervención de rivales, pero mientras salía el diagnóstico se vio metida en casa. «Le he dado muchas vueltas. Al principio no podía mirar el vídeo de la jugada, pero luego la he visto muchas veces. No sé si es morbo o yo qué sé, pero me parece muy raro que me pudiese pasar eso. Lo pasé fatal, llorando casi todos los días, haciéndome mogollón de preguntas», cuenta.
La arritmia en la operación Hasta el 25 de mayo, en la Clínica Cemtro de Madrid, no fue operada por el doctor Borja Ruiz. Y esa intervención no faltaron problemas: «mientras me operaban tuve una arritmia. Luego me hice unas pruebas y estaba todo bien, pero… Se supone que a raíz de ello me salió un trombo debajo de la rodilla. Me dolía muchísimo. El pie se me hinchó tremendamente. Eso me retrasó un mes».
Aparte de la mutua, en su recuperación ha participado muy activamente José Moreno, fisioterapeuta de Physical Salud y que hasta esta temporada lo ha sido de la primera plantilla del Al-Qázeres. También es la pareja de la exjugadora Carla Nascimento. «Siempre la ha tenido como su `pequeña' y ha creído que era la jugadora con más proyección de la cantera», cuenta Moreno sobre la relación entre su esposa y Ollero.
Las cosas fueron mejorando para la chica. El curso acabó bien, aprobó todo y recibió muchos estímulos en la rehabilitación, como los vídeos que grabaron dándole ánimos estrellas como Silvia Domínguez, Marta Fernández y Sergio Llull. También, de la mano de Dani Domínguez y Raúl Hernández, volvió a sentir el placer de encestar en B-Mood, la nave industrial reconvertida a `playground' en La Mejostilla.
«Todo esto me ha dado más fuerza. Si me ha pasado, supongo que será por algo. He madurado mucho», señala Ollero, que agradece especialmente el apoyo de sus padres, José María (bombero) y Cristina (administrativa). Ahora solo queda volver a saltar a la cancha de verdad y disfrutar de lo que más le gusta.
H