Arroyo y Diocesano firman un empate que no satisface del todo a ninguno
Empate a cero goles entre Arroyo y Diocesano en un partido con escasas ocasiones claras de gol fruto del mejor trabajo defensivo que ofensivo de ambos equipos.
El partido se planteó como un duelo táctico en el que Adolfo Senso sorprendía con el dibujo de su equipo, defensa de tres centrales y trivote en el centro del campo, que le daba superioridad por el medio, mientras que el Arroyo tenía más efectivos en las bandas, que si bien no ocasionaron circunstancias de superioridad en ataque, si le sirvió al conjunto de Miguel Ángel Ávila para anular las entradas colegiales. Ese rigor táctico se impuso sin que el encuentro se abriera en ningún momento. No aparecieron los espacios, ni siquiera con el cansancio.
La primera media hora transcurrió sin apenas acercamientos a las áreas. En el tramo final del primer acto se animó algo el partido. La primera oportunidad la tenían los colegiales tras una transición bien llevada por Luismi por el centro, la pelota acabó llegando a Patxi Dávila que centró al corazón del área donde apareció Javi González, llegando desde atrás, pero la volea se le marchó alta.
Ponía la réplica el Arroyo en un centro de Javi López que cabeceaba fuera Adri Calle. Patxi Dávila, con mucha oposición, remató alto un saque de esquina. Antes del descanso, el propio Patxi Dávila y Adri Calle lo intentaron con tímidos disparos desde fuera del área que no generaron problemas a los porteros.
El partido transcurrió por los mismos derroteros en la segunda mitad. Jorge Rastrojo ganaba línea de fondo, pero su pase atrás no encontró rematador. La más clara para los locales llegaba en un espléndido disparo desde fuera del área de Moisés Valencia, respondido con una magnífica estirada de Miguel que sacó el balón junto a la cepa del poste.
La tuvo el Diocesano en las botas de Jorge Rastrojo que ganó la espalda de la defensa en un balón lanzado desde una falta en el centro del campo, y en la que la defensa local se quedó parada reclamando posición adelantada. No lo entendió así el asistente y tuvo que ser la salida de Miguel López la que desbaratara la ocasión.
Apretó el Diocesano hacia el final, en superioridad por la expulsión del local Isaac por doble amarilla en el minuto 90, pero no consiguió generar ocasiones claras ante el trabajo defensivo local.
Reparto de puntos que mantiene al Diocesano aún sin ganar en el 2021 pero con las opciones intactas de acabar entre los tres primeros, merced a la renta generada en la primera vuelta. Por su parte el Arroyo refrenda con un punto el buen trabajo de los últimos partidos ante los equipos de arriba y le sirve para ganar confianza de cara a su tramo final de la temporada con duelos ante rivales directos.
HEl Olivenza quiso pero no pudo. También el Fuente de Cantos, que al menos alarga a cuatro los partidos seguidos sumando (0-0) gracias a las intervenciones de su portero, el mejor en el duelo en la Ciudad Deportiva oliventina.
Arrancó el choque con intensidad, sobre todo por parte de un Olivenza que se lanzó al ataque y que puso en serios problemas a Sergio Pinto en más de una ocasión. En una de ellas, los locales acariciaron el primer gol, pero Javi se topó con el palo. Por su parte, el Fuentes de Cantos se mantenía atrás sin dejar espacios y dejando toda la responsabilidad ofensiva a Sylla, que no dejó de intentarlo con disparos lejanos. En los últimos compases de la primera parte los de Antonio Rueda pusieron una marcha más y cerca estuvieron de sorprender al rival con un lanzamiento que se marchó lamiendo el larguero.
En la reanudación parecía que se igualaron las fuerzas y el primero en probar fortuna fue Nico con un disparo alto. A raíz de esa acción, el Olivenza despertó y volvió a mostrar su versión más ofensiva, volcados hacia la portería rival con un Joaqui Flores eléctrico. Pero en todo momento apareció el guardameta Sergio Pinto muy seguro y saliendo sin miedo ante los constantes centros laterales.
La emoción llegó hasta el tramo final con constantes idas y venidas, aunque en la última acción apareció Luis para cortar un contragolpe clarísima para el Olivenza. Sin tiempo para más, el cuadro local se quedó con la miel en los labios tras generar las ocasiones más claras.
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