expulsa a la alcaldesa de Alburquerque y le pide que dimita

El PP cree que esta decisión llega tarde

Ha tardado en reaccionar, pero lo hizo ayer, tras los lacerantes acontecimientos vividos los últimos meses, semanas y días en el ayuntamiento y en la localidad de Alburquerque. El PSOE pidió a la alcaldesa, la socialista Marisa Murillo, que cese «inmediatamente» de todos sus cargos, tanto públicos como orgánicos bajo las siglas de este partido y le abre expediente disciplinario para su expulsión «con carácter inmediato».

Así lo anunció el secretario general del PSOE en la provincia de Badajoz, Rafael Lemus, quien justificó la decisión del partido en que «por encima del bienestar de la ciudadanía no hay nada y en el PSOE no hay sitio para quien altera el bienestar social de un pueblo». Lemus reconoció que la decisión del PSOE se hizo pública ante la prensa antes de comunicarla a la afectada. A partir de ese momento, el partido se pondría en contacto con el resto de los concejales del grupo municipal para el

Marisa Murillo. nombramiento de otro candidato a la alcaldía. Primero habrá que resolver la situación según la decisión que tome «la excompañera» Marisa Murillo.

Lemus recordó que dos meses atrás, el 12 de enero, él mismo compareció ante la prensa para encomendar a la alcaldesa a presentar un plan de viabilidad en el ayuntamiento debido a los importantes retrasos en el pago de las nóminas a los funcionarios municipales. Transcurrido este tiempo, el PSOE no ha obtenido ninguna respuesta, a lo que se une que en los últimos días se han producido dimisiones de concejalas socialistas en el Ayuntamiento de Alburquerque, de las que tampoco se ha informado a la ejecutiva provincial del partido. Todo ello unido a la «crispación social» existente entre la ciudadanía de esta localidad, ha llevado a la ejecutiva provincial a pedir a la alcaldesa que cese de todos sus cargos, a iniciar el expediente de expulsión por la vía reglamentaria y a impulsar la comunicación con los concejales socialistas para el nombramiento de un nuevo alcalde «a ser posible con las siglas del PSOE». Por ley, el candidato saldría por orden de lista. Lemus no pudo adelantar qué va a ocurrir. «Lo que queremos es que se apacigüen un poco las aguas», aunque sabe que será complicado. El PSOE no se cierra a hablar con otras formaciones políticas con representación municipal porque su objetivo, según su secretario provincial, es que la tensión social en Alburquerque se calme, aunque sea a costa de «sacrificar» la alcaldía.

Sin embargo, para el PP, el PSOE reacciona «tarde». El diputado popular por Badajoz en el Congreso, Víctor Píriz, apuntó ayer que el problema que sufre Alburquerque ha sido generado «únicamente» por el PSOE, al ser «responsable» de presentar la candidatura de Murillo y, por lo tanto, es «cómplice silencioso» de la situación de este ayuntamiento.

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