El Extremadura despide a Zoran Vekic y a Robert como inversores del club azulgrana
El Extremadura les despide tras no proporcionarle el músculo financiero que necesitaba
Apenas tres meses ha durado la aventura del grupo inversor representado por el empresario Ramón Robert y el afamado ex representantes de jugadores Zoran Vekic en el Extremadura. El club azulgrana anunció en la tarde de este miércoles que finiquita la relación contractual que mantenía con ambos profesionales y que, a partir de este momento, da por cerrado ese proyecto para buscar nuevas vías de inversión que inyecten capital en la entidad, un dinero que se antoja vital para la supervivencia del club.
Los acontecimientos se veían venir tras los últimos episodios de la semana. El órdago de Kike Márquez, las palabras reivindicativas de Manuel Mosquera y la presión incesante del presidente Manuel Franganillo hicieron reaccionar a Vekic y Robert con un comunicado hace unos días en los que se mostraban molestos por algunas declaraciones y pedían que no se manchara la imagen de ambos en el Extremadura. Pero, ¿qué ha pasado realmente para que la relación entre ambas partes se haya roto en apenas tres meses?
Las razones son puramente económicas. El actual presidente, Manuel Franganillo, convenció a Robert y Vekic con la condición de que buscaran el fondo de inversión que inyectara capital en el club para salvar la temporada y poder afrontar un proyecto deportivo con sólidas bases, habida cuenta de que había que organizar el concurso de acreedores.
Según ha podido saber este periódico por fuentes cercanas al club, el acuerdo estipulaba que Robert y Vekic se comprometían a traer un capital cercano a los cinco millones de euros para dotar al proyecto del músculo financiero considerado necesario. Como contrapartida, Franganillo adquiría el compromiso de negociar su paquete de acciones para que Robert y Vekic entraran como socios accionistas en el Extremadura, aunque siempre supeditado a la clasificación del equipo, como mínimo, para la Liga Pro.
Durante la presentación del proyecto, Robert y Vekic anunciaron que pondrían en orden los departamentos de la entidad. Han trabajado con el administrador concursal para crear un plan de viabilidad a medio y largo plazo para sostener al Extremadura, pero los cinco millones de euros no han llegado.
En reiteradas ocasiones y reuniones, el presidente Franganillo ha instado a Robert y Vekic a dar soluciones económicas inmediatas a la situación de estrangulamiento que sufría la tesorería del club, acumulándose varias nóminas pendientes a empleados y jugadores. Una vez clasificados a Liga Pro, Franganillo esperaba que Robert y Vekic dieran un paso adelante y trajeran los cinco millones pactados. El dinero no ha llegado y Franganillo ha tenido que hacer frente primero, al último pago pendiente para comprar definitivamente las acciones de Oliver, y ahora tendrá que vérselas con la plantilla, que aún no ha cobrado.
Robert y Vekic insisten en que tienen un acuerdo firmado que Franganillo no está cumpliendo, pero nadie ha desvelado ese documento secreto que, posiblemente, acabará en tribunales. Lo cierto es que Robert y Vekic ya no están en el club. Franganillo abre nuevas vías de inversión.