La afición conecta con la plantilla por su profesionalidad
El equipo recibe b este domingo, en casa, (18.00 horas) al Sanse madrileño
De siempre, la afición del Extremadura ha sido muy fiel con su equipo. Sobre todo, con el escudo. Y casi siempre, con su plantilla. No deja de ser también una afición crítica cuando no ve las cosas bien hechas sobre el césped. Pero, sobre todo, es muy agradecida cuando ve que en el verde, los jugadores, se lo dejan todo. Y eso es lo que está ocurriendo ahora en el Extremadura. Sus futbolistas han acumulado más de tres meses de retrasos en el pago de sus nóminas y, en esas circunstancias, se han unido para sacar adelante los
Latasa, del Real Madrid, y Dani Pérez, del Extremadura, en el último partido liguero en Valdebebas. resultados. Tras clasificarse para la liga Pro, el Extremadura inició en Valdebebas el camino en busca de los playoff con un meritorio empate ante el Castilla. Los jugadores
esperaban haber cobrado en esa semana. Y no lo hicieron. La afición es conocedora de lo que ocurre y ahora, entre las peñas, el sentimiento que queda es que son
los futbolistas los que se están batiendo el cobre. «Ahora mismo son nuestro orgullo», dicen algunos aficionados.
La directiva trata de buscar soluciones. No es fácil. Tras romper con Vekic y Robert, Manuel Franganillo se está moviendo para buscar nuevos inversores. Y en medio está el proceso concursal, que impide canalizar pagos con agilidad.
El Extremadura jugará este domingo ante el Sanse, a las 18.00 horas en el Francisco de la Hera. Pude haber público (hasta el 50% del aforo). El Sanse ha sido revelación este año y va segundo del mini grupo de seis equipos, con seis puntos más que el Extremadura, que es cuarto.
En las filas del Sanse, aunque no de jugador, hay un viejo conocido azulgrana. Se trata de Miguel Ángel Marín, un histórico jugador del CF Extremadura que formó parte de la plantilla del primer ascenso a Primera División en 1996. Marín es delegado del Sanse y se reencontrará en la banda con los Manuel, Pedro José y Tirado. «Estoy deseando que llegue el partido. Para mí, Almendralejo siempre será especial. Lo que vivimos aquellos años fue maravilloso. Guardo muy buena relación con todos. Y luego está la afición, que es envidia sana de muchas otras de España.
El Extremadura afronta el partido con las bajas de Sergio Gil y Sebas Coris, lesionados; y Nico Hidalgo, sancionado.
H